El grupo perseguidor parece más cerca

El circuito se denomina Gilles Villenueve, en recuerdo del mítico piloto canadiense, que nunca logro ser campeón del. mundo, pero que es una leyenda para muchos aficionados a la Fórmula 1 y es un lugar donde siempre ocurren cosas. Los entrenamientos clasificatorios que transcurrieron bajo la lluvia fueron una muestra y, aunque Verstappen se hizo con la 'pole position', si no hubiera sido por el accidente de Piastri hoy estaríamos hablando de la 'pole' de Fernando Alonso, pues el asturiano venía en tiempos de hacerse con ella y solo se la quitó la bandera amarilla provocada por el neozelandés. Lo cierto es que en esta carrera por vez primera hemos constatado que la distancia del grupo perseguidor se ha reducido con respecto a los Red Bull y en concreto con Verstappen, pues el segundo coche del equipo sigue en horas bajas y la posición de Checo Pérez se debilita cada vez más.

La carrera no tuvo gran historia. Verstappen no falló en la salida y se hizo con la carrera de principio a fin. Eso sí, la diferencia que antes era de casi treinta segundos en esta ocasión se redujo a siete, y eso es una buena noticia, siempre y cuando el holandés no se guarde algo en el bolsillo que pueda sacar cuando le aprieten un poco más. Alonso y Hamilton revivieron antiguas deudas pendientes y estuvieron batallando toda la carrera, y el adelantamiento del español al inglés seguro que le ha servido para reconfortarle un poco en el ánimo de los años pasados, cuando el asturiano no tenía la mínima oportunidad de luchar. Al final de la prueba se le veía muy contento con el resultado conseguido, algo impensable hace solo siete meses cuando fichó por Aston Martin.

También se ha podido constatar que el 'grupo perseguidor', léase Mercedes y Aston Martin, ha dado un paso adelante y que las mejoras mecánicas que traían a Canadá han funcionado. Otra historia es Ferrari. Los italianos parecen estancados en el desarrollo de su coche y eso les obliga a ir a la contra en las estrategias de las carreras, con lo que en unas ocasiones, como aquí, le dan resultados y en otras parecen fuera del panorama. En esta ocasión se llevaron unos buenos puntos de cuarto y quinto, después de que fueran a una estrategia cambiada y ser los únicos en salir a carrera con los neumáticos más duros. Dicho esto, el ambiente en el equipo italiano no es el mejor y el que debía ser su figura indiscutible, Charles Leclerc esta desdibujado y lejos de la lucha por l'a victoria, mientras que Carlos Sainz cada vez se le acerca más, aunque le falta la última décima en entrenamientos para que su equipo le tenga muy en cuenta.

Lo más destacable el gran resultado de Alex Albon. El piloto tailandés logro llevar a su Williams hasta la séptima posición, tras traer un paquete de mejoras aerodinámicas que funcionaron muy bien. Esperemos que no sea un espejismo y que el laureado equipo inglés comience aquí su escalada. De la misma forma parece que Renault también ha mejorado, pero siguen siendo muy inconsistentes. El octavo de Ocon es un resultado muy pobre para los franceses, mientras que en McLaren siguen sumidos en la miseria, y eso que sus dos pilotos, Norris y Piastri, son los dos jóvenes con más potencial de la parrilla. ¡Hasta Austria!