El Antequera dispara la ilusión por el ascenso a Primera RFEF

En los recuerdos queda aquel primer gran hito deportivo en el entonces campo de tierra cuando el Club Deportivo Antequerano, el 20 de junio de 1981, ganó al Telde y ascendió a Segunda B, la tercera categoría del fútbol español. Hubo que esperar 27 años para una hazaña similar. Fue el 15 de junio de 2008 en el Nuevo Maulí, cuando ante seis mil espectadores se ganó por 2-1 al Caravaca. Y recientemente, tras la reestructuración del fútbol español, en 2021 se ascendió a Segunda RFEF, la hoy cuarta categoría, tras ganar al Malagueño.

Ahora, 41 años después del primer gran ascenso, se vuelve a pensar en las gradas del Maulí: «¿Y si esta temporada volvemos a ascender, pero a Primera RFEF?». De momento, los números son claros y evidentes. De los cinco grupos, el Antequera es el mejor líder. Tiene 29 puntos y 9 victorias por los 27 y 8 del Arenteiro, los 27 y 8 victorias del Sestao River, los 25 puntos y 7 del Peña Deportiva y los 24 y 7 victorias del Melilla. No hay líder con mejor estadística, por lo que el equipo de Abel Segovia es el mejor de los cinco grupos de Segunda RFEF.

Los números del campeón

Tras la época de Aybar en el banquillo y la transición de Nacho Pérez en el club, empezó la de Abel Segovia, quien, tras jugar en varios equipos de España, se aventuró a entrenar en Colombia, desde donde recibió la llamada del Antequera. En doce partidos, ha ganado nueve, ha empatado dos y lleva una sola derrota, con 24 goles a favor y 10 en contra.

Con una plantilla joven, en la que se fueron los pesos pesados y veteranos jugadores de épocas anteriores, en el equipo verdiblanco, empezaron a venir las victorias pero sobre todo el buen juego. Del «nunca dejes de soñar» de anteriores campañas se ha pasado, como recalca Abel Segovia, al «partido a partido» con el «objetivo de la permanencia», pero con el sueño de ascender. El club, mientras tanto, recibió a finales de la pasada campaña la llegada de los dueños del Utrecht neerlandés, que adquieren el 67 por ciento de una sociedad anónima deportiva en creación. Todo, con el objetivo de potenciar la llegada de los mejores talentos africanos y de mantenerse en Segunda RFEF y aspirar a ascender la próxima campaña, según anunciaron el presidente, Ángel González, y el representante de los neerlandeses, Jeroen Oskam. El 24 de mayo se hacía realidad un proyecto que llevaba meses vislumbrándose y que está pendiente de dar sus frutos. Jugadores como Mawuli Mensah, joven talento de 19 años procedente de la cantera del Utrecht, abría las puertas del futuro del equipo.

Alberto Aguilar es el director deportivo, y Eduardo Espada, el director general. Llegó la pretemporada y después los ajustes internos y las salidas de jugadores. Pero el tiempo ha hecho olvidar a los que estuvieron y crear un equipo joven, ágil, rápido, con hambre para el que repescaron a Luis Alcalde, el capitán y faro del equipo. Junto a él, Eric Puerto se ha afianzado en portería y el ataque tiene en Ale Marín, Utrilla, Montori y el canterano Isra a los artífices de la velocidad, goles y resultados del equipo líder de los cinco grupos.

Entre tanto, el Ayuntamiento ha empezado a mejorar el estadio, adecentando los graderíos, con dos mil asientos de plástico para la zona de preferencia, un videomarcador, el cuidado del césped y los inminentes proyectos de reforma de los vestuarios y de la iluminación del terreno.

Alberto Aguilar no lo oculta. «Mientras veamos luz, vamos a ir a por ella, y si este año se pudiera ascender, sería un pelotazo muy grande. Tenemos las ideas claras y no nos volveríamos locos con presupuestos y fichajes. La filosofía es clara». Aunque insiste: «El objetivo es la permanencia, pero no vamos a renunciar a nada». Es un equipo «con mucha hambre y es lo que nos llevará a donde vamos con una plantilla muy joven. Estamos disfrutando muchísimo». Lo que tenga que venir, vendrá, aunque la ilusión se ha disparado en Antequera.