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El Maulí acoge este sábado otro partido importante para el Antequera, a las 16.00 horas, ante el San Fernando. Tras dos derrotas y un ... empate, los hombres de Javier Medina necesitan ganar para romper la tónica de malos partidos y seguir en la parte alta. Enfrente, un San Fernando necesitado de puntos, ya que está un puesto por encima del descenso. De ahí que sea una nueva final.
Las últimas derrotas del Antequera le han hecho bajar un escalón más, al noveno puesto, con esos 32 puntos que tenía. El San Fernando, que está en la décimo quinta posición, tiene 26 puntos, sólo 6 menos que los blanquiverdes. Puntos que dicen mucho de lo apretada que está la clasificación, con pocas diferencias entre los equipos, lo que presupone una liga, más intensa a partir de ahora.
El Antequera intentará encontrar el gol, mover banquillo y dejar atrás el partido de Baleares. En esta cita, el extremo Pol Prats podrá entrar en la convocatoria, esperando ser un nuevo revulsivo.
Antes del choque, el técnico Javier Medina dice que se trata de «una nueva oportunidad para cambiar esta dinámica de resultados». Para ello, tienen ganas de levantarse, «como lo hemos hecho siempre, y esperamos que cambie esta dinámica en casa ante el San Fernando». Reconoce «lo difícil que va a ser la segunda vuelta». «Cuando el miedo es alto, la tensión sube» y tras un buen resultado contra los equipos que están por debajo, ahora toca sufrir en la segunda vuelta. «Nadie regala nada, se juegan la vida». Del San Fernando reconoce que «es un rival con mucho talento y muchos recursos para atacar».
Tras la salida de los holandeses tras el ascenso a Primera RFEF, empezó esta temporada con la intención de buscar a alguien que coja el testigo e ilusione al club con dinero que haga posible el sueño de seguir creciendo. Este lunes se presenta la apuesta de Mike Garlick, un empresario inglés con residencia en Marbella que fue propietario del Burnley Football Club.
Desde hace meses, el Antequera está en transformación en sociedad anónima deportiva, con lo que cambiará por completo el proyecto. Garlick depositaría cerca de un millón para hacerse cargo de la mayoría de acciones, a quien le seguiría en representación el actual presidente Ángel González.
Desde finales de año, se ha visto a Mike Garlick por El Maulí, iniciando el proceso hace menos de un mes con las primeras escrituras de entrada en el club. Al Burnley, equipo de una ciudad de algo más de 70.000 habitantes, lo metió en la Europa League desde la Premier. Tras el éxito, lo vendió y empezó nuevo proyecto en Gibraltar con el St Joseph's de la National League. Tras intentarlo el pasado año con la Balompédica Linense, ahora quiere fijarse en el Antequera.
Su idea empezó con la renovación de Javier Medina como técnico para la próxima temporada con el fin de que dirija el proyecto con el objetivo esta campaña de la permanencia y, para la próxima, de dar un salto de calidad que abra el horizonte a poder soñar con el ascenso a Segunda.
Su hombre de confianza es Álvaro Pérez, el ya director general del club, quien se prevé que siga trabajando junto a Alberto Aguilar y Álvaro Silva, para construir el nuevo proyecto. Todo esto será su proyecto que presentará el lunes y que querrá ser un regalo de Reyes de cara al próximo año.
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