El otro gran 'crack' que va a jugar en La Rosaleda

Aunque Odegaard ya estuvo recientemente tres veces en el feudo de Martiricos con Noruega, siempre lo hizo durante la fase más crítica de la pandemia, a puerta cerrada. Su selección perdió por 0-3 ante Turquía el 27 de marzo de 2021, ganó por la mínima a Luxemburgo (gol de Haaland) el 2 de junio, y perdió de nuevo, ahora ante Grecia (1-2), el 6 de junio.

Pero ahora Odegaard, que sólo tiene 24 años recién cumplidos, llega en plena madurez. Totaliza siete goles y cinco asistencias en el equipo más joven de la Premier (24,7 años de edad media) e iguala la producción de su compañero Saka –seis tantos y seis pases de gol– y de De Bruyne (3-9), del Manchester City. Por delante sólo intervienen de forma directa o indirecta en más tantos los tres grandes artilleros del torneo: su compatriota Haaland (21 dianas y tres pases), Kane (Tottenham, 15-1) y Toney (Brentford, 12-3). De los cinco goles y siete asistencias en 40 encuentros de la 2021-22, a los cinco tantos y siete pases en apenas la mitad de partidos, sin haber llegado aún al ecuador liguero.

Además, Odegaard es uno de los jugadores que más regates con éxito completa y también uno de los que ofrece más pases clave, que crean una ocasión de gol. Instalado en el 4-3-3 de Arteta, que por momentos es más un 4-2-3-1, se encuentra muy cómodo al timón del equipo, donde más le gusta, liberado por el esfuerzo del suizo Granit Xhaka y del ghanés ex del Atlético de Madrid Thomas Partey.

Sin embargo, tantos elogios a la figura de Haaland oscurecen el papel actual de Odegaard, que acaba contrato en 2025. Pese a que, sorprendentemente, Noruega no se clasificó para la fase final del Mundial, superado en su grupo por Países Bajos y una Turquía caída en la repesca, ahora al volante del Arsenal también le llueven todo tipo de piropos. "Este chico es Mozart, hace rodar el balón entre las piernas de la gente, parece una reencarnación del mejor Özil", dijo el excentral Rio Ferdinand, hoy uno de los comentaristas mas célebres de la Premier. En Sky Sports, Paul Merson no le fue a la zaga al comentar su asistencia para el 1-4 de Martinelli al Brighton el 31 de diciembre: "De Bruyne la ve, Odegaard la ve, pero no creo que haya otro jugador en la Premier League que lo haga...".

Hasta Arsene Wenger, técnico en el último ciclo glorioso de los 'gunners' se pone a sus pies: "Toma decisiones rápidamente, y siempre de forma óptima. Me gusta y la forma en que hace que el fútbol parezca tan fácil. Es un líder en el equipo". Pero su entrenador, actual, un Arteta que precisamente se movía como jugador en la misma demarcación, le pide más: "Creo que físicamente todavía puede mejorar en muchas áreas. La forma en que puede conducir con el balón y eliminar rivales, su centro de gravedad, su rango de pase aún puede ser mejor".

Ahora el Arsenal oposita con argumentos al título de la Premier tras años muy discretos: dos octavos puestos (2019-20 y 2020-21) y otro curso fuera de la Champions (2021-22) tras 393 millones de euros en fichajes durante el ciclo de Arteta. Ahora tiene cinco puntos de renta sobre el segundo (el City) y nueve sobre el tercero, el Newcastle, a dos jornada de cerrar la primera vuelta. Sus 43 puntos con un partido menos fueron, incluso, el cuarto mejor inicio de siempre en el fútbol inglés tras los 46 de Tottenham (1960-61), Liverpool (2019-20) y City (2017-18). Todos ellos ganaron la Liga.

En realidad, a Odegaard sólo hubo que darle tiempo para que triunfara. Meses después de aparecer en la máxima categoría noruega, siendo ya una celebridad mundial por su proyección, firmó por el Real Madrid y, aunque debutara a modo testimonial en la última jornada de la temporada 2014-15, en un 7-3 al Getafe (tenía 16 años y 157 días y batió el récord histórico de Rivera), en realidad no triunfó de merengue. Se fogueó en el Castilla en Segunda B y tuvo cesiones al Heerenveen (2017-18), Vitesse (2018-19) y Real Sociedad (2019-20), donde ya comenzó a despuntar, en una temporada con cuatro goles y cinco asistencias, pero yendo claramente de más a menos.

La falta de confianza de Zidane en él, también ante la competencia de jugadores como Modric, Kroos, Valverde o Isco, se sumó a una recomendación clara de Ancelotti: "A Odegaard le he dicho que hay ocho jugadores en su posición y por ahora no está inscrito". Días después, en agosto de 2021, se fue al Arsenal por 35 millones, frente a los 2,8 pagados por él en su momento. Sólo había jugado 11 partidos y 489 minutos de blanco. Al final de la 2020-21 ya había estado cedido en Londres, y ahora se ejercía por fin su compra. Hasta hoy.