Despedida a lo grande de Cazorla y Bruno Soriano

El conjunto castellonense peleará para mantener la quinta plaza, para lo que necesitan ganar su partido, o empatar y que la Real Sociedad no gane por más de dos goles de diferencia; mientras que el Eibar, ya con la salvación en el bolsillo, solo se juega no perder la decimotercera plaza de la tabla clasificatoria.

El equipo armero pone fin a una temporada plagada de adversidades solventadas con nota y visita a un Villarreal que no tiene asegurada la quinta plaza para darse un homenaje a la espera de comunicar el futuro del técnico José Luis Mendilibar para la próxima temporada.

La campaña ha sido anómala y ha afectado a lo que parecía una tradición en el club guipuzcoano, renovar a Mendilibar según lograba el objetivo de la permanencia, aunque por las últimas declaraciones del técnico todo apunta a que seguirá en la capital armera la próxima temporada en un nuevo proyecto.

Al preparador vizcaíno y a su equipo les toca de momento finiquitar la temporada con el objetivo de lograr 45 puntos y consolidar la decimotercera posición que ocupa en la actualidad, todo un éxito si se recuerda lo que ha tenido que pasar el Eibar en los últimos meses.

El derrumbe de un vertedero en la localidad de Zaldibar generó una alarma y obligó en febrero a aplazar un partido ante la Real que hizo mucho daño al conjunto eibarrés, ya que venía en una buena línea de juego y resultados hasta ese momento.

El encuentro ante los donostiarras lo tuvo que jugar el Eibar ya sin público por la afectación de la Covid-19, último que se disputó previo a un confinamiento en el que los eibarreses fueron noticia por los recelos de los jugadores a retomar la competición sin garantías para su salud.

Luego llegó la marcha de Fabián Orellana y Gonzalo Escalante el 30 de junio, dejando huérfano a su equipo en las últimas jornadas en las que se jugaba todo de dos de los hombres más importantes del equipo y con mayor experiencia para haber llevado la nave a buen puerto, ruta que al final encontró con jugadores menos habituales.

Ahora el Eibar se juega el domingo la honrilla y complicarle la vida a un Villarreal que todavía no tiene garantizada la quinta plaza aunque es el que parte en mejor posición para ello de todos los candidatos. Encuentro en el que puede haber un premio para los jugadores azulgranas que menos minutos han tenido esta temporada.

Joel debería ser el baluarte defensivo en portería después de su excelente actuación contra el Valladolid, en la que fue el mejor del equipo, y hombres como Pedro León, De Blasis, Cristóforo o el brasileño Charles, todos ellos incógnitas en cuanto a su continuidad dentro de unas semanas en el nuevo proyecto del Eibar, pueden estar ante su último encuentro con la camiseta azulgrana.

Los castellonenses afrontan un partido que además será muy especial, ya que va a ser la despedida de dos jugadores históricos como Bruno Soriano y Santi Cazorla.

Ambos finalizan su contrato con el club, y ya se ha anunciado que su decisión es la de no continuar de amarillo. En el caso de Cazorla, el mediocampista está cerca de fichar por el Al Saad de Cata, mientras que Bruno Soriano ha decidido acabar su carrera deportiva tras tres años de lesiones, por lo que dice basta.

El club quiere cerrar la temporada haciéndole un homenaje tras el partido, por lo que ambos comparecerán tras el mismo con el presidente Fernando Roig.

El equipo sigue con las bajas por lesión de Carlos Bacca y Ramiro Funes Mori, al que se le puede sumar el tocado Paco Alcácer.

El posible once de los amarillos puede ser el formado por Sergio Asenjo como portero, al que acompañarán en defensa Mario Gaspar, Raúl Albiol, Pau Torres y Alberto Moreno, un centro del campo con Bruno Soriano y Zambo Anguissa como pivotes, a los que se agregarán Santi Cazorla, Samu Chukwueze y Vicente Iborra o Moi Gómez, para jugar con el máximo goleador del equipo, Gerard Moreno, como único delantero referente.

El Villarreal doblegó al Eibar con una pletórica segunda mitad (4-0) en un partido entre dos equipos con los deberes hechos y sin exigencias competitivas y cuyo centro de interés fue la despedida como vilarrealenses de su capitán, Bruno Soriano, y de Santi Cazorla.

Tras una primera parte igualada, en la recta final se hundió el Eibar y el Villarreal lo aprovechó para golear a su rival con tres de sus cuatro goles en los últimos ocho minutos y que sirvieron para ratificar al equipo castellonense como quinto clasificado de LaLiga Santander.

A falta de objetivos deportivos, el partido estuvo marcado por la emotividad de la despedida de dos de los grande iconos de la la historia del Villarreal como Bruno y Cazorla. En el primer caso porque cuelga las botas y en el segundo porque se va a Catar a acabar su carrera futbolística. Ambos fueron titulares como homenaje a dos futbolistas históricos de la entidad castellonense y que han marcado una época.

Aunque fue el Eibar el que empezó algo más metido en el partido, al poco de cumplirse el cuarto de hora de juego el Villarreal se hizo con la posesión del balón aunque sin que se tradujese en ocasiones claras de gol ante la meta rival.

Por contra el equipo de Mendilibar, totalmente liberado por su situación clasificatoria, esperaba a su rival y tuvo una buena opción para batir a Andrés Fernández con una volea de Kike que salvó el meta local y a la que respondió Gerard Moreno poco después con un tiro cruzado que se fue fuera por poco.

Superada la media hora de juego, el Villarreal se hizo con el control casi completo del juego ante un Eibar replegado pero que tan solo pasó apuros en su portería en los últimos compases de este periodo aunque sin que el equipo local lograse batir a Yoel.

Los últimos 45 minutos de la temporada en La Cerámica apenas variaron mucho de los sucedido en la primera mitad. El Villarreal seguía con el mando del partido, aunque ahora el Eibar trataba de dificultar con un poco más de intensidad la salida de balón del equipo de Javi Calleja.

Sin embargo, fue el Villarreal el que siguió buscando la portería rival con Santi Cazorla como protagonista en casi todas sus acciones cerca del área del Eibar. Era su último partido y el asturiano mostró varias pinceladas de su mejor repertorio.

Conforme avanzaba el partido el equipo de Javi Calleja hacía más patente su dominio y sus llegadas al área se intensificaron. En esa situación el conjunto castellonense logró abrir el marcador en el minuto 71. Un sobresaliente pase de Cazorla dejó solo a Anguissa, que tras recortar a un defensor batió a Yoel.

El Villarreal siguió con el control del partiod con un magistral Cazorla, que puso fin a su trayectoria en el Villarreal en el minuto 82 al ser sustituido y con todos los futbolistas aplaudiendo el momento del cambio.

A cuatro minutos del final del partido, Gerard Moreno rubricaba la gran temporda personal y del equipo con el segundo gol local y que daba paso a otro de los momentos emotivos de la tarde: la salida del campo de Bruno Soriano, que se fundió en un abrazo con Javi Calleja, quien no pudo contener las lágrimas por la emoción del momento y porque también apunta a su salida del banquillo del Villarreal esta temporada.

El Eibar se vino abajo en el último tramo del partido asfixiado quizá por el calor y humedad reinantes y de nuevo Gerard Moreno batía a Yoel para hacer el 3-0 en el minuto 89, mientras que Moi Gómez hacía el cuarto en los últimos instantes del tiempo añadido.