El gol más insólito de la temporada

Sucedió este mediodía, en el Duisburgo-Ingolstadt (2-1), de la segunda categoría alemana. El portero del cuadro local, el holandés Mark Flekken, protagonizó un comportamiento insólito. Le dio la espalda al juego durante muchos segundos para dirigirse a recoger su botella de agua dentro de la portería. El resultado fue un gol encajado que, afortunadamente, no le costó ningún punto al cuadro local.

Enseguida la jugada, que parecería un burdo montaje por increíble en su desarrollo, se ha convertido en viral en las redes sociales y las webs deportivas. ¿Qué pensó realmente Flekken, un portero de 24 años que ya fue protagonista en otra ocasión por marcar en la portería rival?