El Barcelona ha comenzado el año 2025 como un tiro. El equipo de Hansi Flick se ha impuesto en apenas dos semanas a Barbastro, Athletic, Real Madrid y Betis. Lo ha hecho dando auténticas exhibiciones futbolísticas y también dando una pequeña vuelta al libreto que ... los culés desgastaron en el primer tramo de la temporada. La aparición de Dani Olmo como falso nueve denota la ambición de Flick de construir un equipo con nuevas alternativas contra diferentes rivales. Es una vuelta más a un modelo que necesita ser moldeable para no perder eficacia.
«Dani sabe muy bien cómo jugar de nueve. Ha jugado ahí en la selección nacional. Hablé con él porque Lewy no era una opción. Le he dado tiempo para recuperarse. El plan era bueno. Hemos hecho buena estrategia, hemos controlado el balón y la distancia entre los jugadores ha sido buena», afirmó Flick la noches del miércoles tras el contundente triunfo de su equipo contra el Betis por 5-1. El técnico alemán acabó satisfecho después de un experimento que salió a la perfección y que pretende reforzar la capacidad que tiene el Barça para llegar desde la segunda línea.
Y es que Dani Olmo fue un anzuelo para el Betis. El futbolista de Tarrasa, que ya ha dejado atrás todos los problemas relativos a su inscripción, jugó de falso nueve y le otorgó al Barcelona infinidad de variantes. Cayó a la mediapunta para generar superioridades junto al resto de centrocampistas, se ofreció para asociarse con el resto de atacantes y, sobre todo, dejó espacios a su espalda para que atacaran los dos extremos a través de diagonales o incluso cualquiera de los tres centrocampistas, como ocurrió en el tanto de Gavi que abrió la lata.
Un respiro para Lewandowski
La posición de Dani Olmo es una vuelta de tuerca que ha buscado Flick tras un tramo de la temporada en el que al Barça se le encasquillaron varios rivales en bloque bajo. Le ocurrió contra Las Palmas, Leganés y Atlético y la medida inicial fue sacar de posición a Lewandowski con más frecuencia de la habitual e intentar que el polaco se asociara más con el resto de sus compañeros. Esa idea ha funcionado a cuenta gotas, pero Dani Olmo ofrece un plus por su facilidad para jugar entre líneas y la capacidad que tiene para encontrar rendijas en la zaga por las que habilitar a los llegadores del Barça, tal y como ocurrió en el tanto de Ferran Torres ante el Betis.
La posición que Dani Olmo estrenó ante el Betis le va a permitir a Flick también dar más descanso a Lewandowski. El punta polaco ha acumulado muchos minutos en lo que va de temporada y el Barça se adentra en un momento de la competición en el que abundan los partidos. Hasta ocho disputarán los azulgranas en un enero frenético en el que podrá contar por fin con una plantilla amplia. Tan solo Iñigo Martínez y Ter Stegen del primer equipo están en el dique seco. Todo un respiro para Flick, que está listo para dar una vuelta a su modelo.
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