México no pasa del empate a cero ante Bolivia

En una fría noche en Viña del Mar, la selección "suplente" de México no fue capaz de vencer a la modesta Bolivia y se jugará sus aspiraciones de pasar a la siguiente fase de la Copa América 2015 en su choque ante la anfitriona Chile.

En los días previos, el técnico Miguel 'Piojo' Herrera repitió que era imprescindible hacer los deberes ante Bolivia y asegurar los tres puntos porque los siguientes partidos contra Chile y Ecuador en el Grupo A se antojaban mucho más complicados.

Bolivia venía de ser vapuleada 5-0 una semana atrás en un amistoso contra una Argentina sin Messi ni Tévez y en Copa América acumulaba una racha de 16 partidos seguidos sin ganar.

Pero el 'tri' no logró pasar del empate a cero con Bolivia en un partido que exhibió las carencias de esta selección alternativa que tuvo que construir a última hora Herrera por la ausencia de las figuras aztecas, a las que reservó para la Copa Oro de julio en Estados Unidos. "No es para estar contentos", reconoció tras el partido el delantero argentino nacionalizado Matías Vuoso, de 33 años, cuya titularidad por delante de Raúl Jiménez (Atlético de Madrid) fue muy cuestionada.

En la primera mitad, México no tuvo juego ni llegadas al área. En la segunda los jugadores dieron un paso al frente y apretaron al rival, pero no concretaron ninguna de las opciones de gol de las que dispusieron. "Tuvimos oportunidades, pero no fuimos contundentes", lamentó en rueda de prensa Herrera, que aun así se mostró satisfecho con el rendimiento general del equipo. El seleccionador, cuyos llamativos festejos fueron una de las estampas del Mundial de Brasil 2014, volvió a ser el viernes un espectáculo en la banda con sus protestas a los árbitros.

El 'tri' reclamó dos penaltis en la segunda mitad, uno sobre Javier Güemez y otro sobre Javier Aquino. Las protestas continuaron desde la propia cuenta de Twitter de la Federación Mexicana de Fútbol: "Consideramos que era penal sobre Güemez", recalcó el organismo.

Dudas sobre planteamiento

Acabada la conferencia, el 'Piojo' subió al autobús del equipo con el rostro desencajado, en medio de dudas de los comentaristas que opinaban que su inamovible sistema 5-3-2 resultó demasiado prudente ante el nivel ofensivo de Bolivia y su planteamiento con un sólo punta, Marcelo Moreno Martins.

Preguntado por estas dudas, el veterano central Rafa Márquez, que acabó sustituido por molestias en la pierna izquierda, dijo que es una reflexión que compete al técnico. Pero en su respuesta, el capitán tampoco hizo una defensa personal del planteamiento. "No puedo opinar tanto porque es el estilo con el que jugamos, es el estilo del entrenador y es el que tenemos que respetar e imponer dentro de la cancha. Esa pregunta que la responda el entrenador", dijo Márquez en la zona mixta.

Ante las prisas por abrir el marcador, Herrera aprovechó el relevo de Márquez en la segunda parte para introducir al centrocampista Aquino (Rayo Vallecano, España) y pasó a jugar con cuatro defensas. Las entradas del incisivo Aquino y del joven Raúl Jiménez pusieron en superioridad a México pero ya no hubo tiempo para el gol.

La única nota positiva del choque fue la confirmación de que su jugador más hábil y peligroso, el joven Jesús Manuel 'Tecatito' Corona (Twente, Holanda), parece decidido a ser uno de los descubrimientos del torneo.

Con el fantasma de la vergonzosa eliminación en primera ronda en Argentina 2011 y la incertidumbre por las molestias del capitán Márquez, México debe rehacerse para puntuar el lunes ante la crecida Chile y mantener sus opciones de clasificación en el último partido ante Ecuador.