Defensa de equipo ganador

Y cuando dos rivales se conocen tan bien y se juegan tanto hizo que no tardaran ni un solo segundo de partido para que, de memoria, se pusieran a trabajar para parar las virtudes del rival, hacer daño donde más le duele al otro y para intentar imponer cuanto antes y cada uno su propio ritmo, el Unicaja su poderío físico desde la defensa, la intensidad y el rebote para poder correr, jugar a campo abierto y hacer tiros temprano y el Tenerife desde la más elaborada selección de sus tiros con el mejor 'pick and roll' de la Liga Endesa y llevar desde un buen balance defensivo al Unicaja el máximo tiempo posible al cinco contra cinco.

Ibon Navarro de nuevo no repitió quinteto y esta vez se plantó en la cancha con Sima, Osetkowski, Brizuela, Ejim y Perry que mostraron desde el primer momento cuáles eran las premisas impuestas desde el banquillo y consiguiendo desde las primeras posesiones una de las claves para parar a su rival: romper la conexión de Marcelinho y Shermadini en su famoso 'pick and roll', saltando en la salida del base y ayudando desde el lado débil las continuaciones del pivot con mucho éxito, Vidorreta rotó a Shermadini con Guerra sin éxito, que no volvió a la cancha el resto del partido, y buscando también en Diagne las soluciones que nunca llegaron.

De esta manera los dos jugadores más brillantes del rival no tuvieron impacto alguno en el devenir del partido quedando el El Lenovo Tenerife en la primera parte en unas pauperrimas cifras de anotación y muy desquiciado. El Unicaja a pesar de su pérdidas y sin tener demasiado acierto ofensivo comenzó a marcar diferencias cada vez más importantes en el marcador.

El Tenerife en el tercer cuarto salió dispuesto a encontrar en las esquinas la solución a sus problemas ofensivos pero el Unicaja mantuvo en todo momento una alta intensidad que no solo no dio oportunidades a su rival sino que hizo que Perry se convirtiera en dueño y señor del ritmo del partido, encontrando tras cada pérdida del rival, rebote defensivo o mala selección de tiro del Tenerife rápidas transiciones para anotar con rapidez o encontrar a compañeros abiertos y castigar un balance defensivo cada vez más pobre por parte de los de VIdorreta, para romper definitivamente el partido en sus momentos más brillante. Y es que Perry en campo abierto es uno de los mejores jugadores de la liga.

Al Unicaja Nadie le ha regalado nada, fundamentó su victoria en en una enorme defensa táctica y de esfuerzo, doblegando a su rival apoyado en las virtudes que distingue a los ganadores y construyendo a partir de ahí todo su juego. La ventaja de campo vuelve a Málaga de donde ya no debe salir.