Geoghegan Hart se lleva el Giro más emocionante

Geoghegan Hart, que tapó las ausencias o desfallecimientos de los líderes del equipo Ineos, subió por primera vez al podio de una gran vuelta. Lo mismo que sus acompañantes en el cajón, Hindley y el neerlandés Wilco Kelderman, ambos del conjunto Sunweb.

La 21ª y última etapa, una contrarreloj de 15,7 kilómetros, fue ganada por el italiano Filippo Ganna, campeón del mundo de la disciplina que se ha llevado las tres cronos de esta edición de la ronda italiana. El italiano entregó a la formación británica su séptimo triunfo de etapa. Ineos ha ganado un tercio de las etapas del Giro pese al abandono, el tercer día de carrera, de su jefe de filas, el galés Geraint Thomas.

Ni Thomas ni los otros cuatro favoritos en el momento del pistoletazo de salida, el 3 de octubre en Sicilia, aparecieron en el podio de Milán. Simon Yates (Mitchelton) y Steven Kruijswijk (Jumbo) dieron positivo por covid-19, mientras que el danés Jakob Fuglsang (Astana, 6º) y el italiano Vincenzo Nibali (Trek, 7º) fueron víctimas de su edad.

En una carrera que vio por primera vez cómo dos corredores se presentaban en la línea de salida de la última etapa con el mismo tiempo, Geoghegan Hart se vistió por primera vez con el rosa tras cruzar la meta de Milán.

La incertidumbre entre Hindley y Geogeghan Hart, que acudieron a la ronda italiana en calidad de gregarios y acabaron luchando por la 'maglia' rosa, solo duró unos instantes. El australiano, que salió el último en la crono por ser líder por centésimas, se dejó 22 segundos en el punto intermedio, tras 10,3 kilómetros.

«Es decepcionante perder la maglia (rosa) el último día. Es difícil de aceptar. Tengo que felicitar a Tao, que fue el mejor. Sabía que iba a ser duro poder estar a su nivel», declaró el australiano con deportividad.

Geogeghan Hart es, por su parte, el segundo británico en ganar esta ronda centenaria, nacida en 1909. Dos años después de Chris Froome, protagonista de una espectacular remontada a dos días del final en 2018. Desde sus inicios profesionales en 2017, en el equipo Sky convertido en Ineos, el londinense solo sumó dos triunfos de etapa en el Tour de los Alpes 2019. Hasta el momento había desempeñado un papel de gregario para sus líderes.

Para el Ineos, de lejos el equipo más rico del pelotón, esta victoria tiene un sabor a revancha parcial tras su sonado fracaso en el Tour de Francia. El campeón defensor del trono, el colombiano Egan Bernal, designado líder único, tuvo que abandonar en la tercera semana de la ronda gala.

Esta 103ª edición del Giro pudo concluir pese al alarmante recrudecimiento de la covid-19 en Italia, como en el resto de Europa. Varios corredores, entre ellos Yates y Kruijswijk, dieron positivo por coronavirus y dos equipos (Mitchelton, Jumbo) optaron por retirarse antes de llegar al ecuador de la prueba.

Pero el Giro pudo acabar tomando medidas drásticas, como la ausencia de público en la llegada para aplaudir al campeón frente al Duomo de Milán. «El Giro respetó todas las reglas. Alcanzar la meta de Milán es una gran victoria para un país que ha demostrado, a través de un evento deportivo, que se podía ir adelante, pese al covid», celebró el director del Giro, Mauro Vegni.