El Trops no jugará la fase de ascenso a la Asobal

Aunque el Trops hizo lo que tenía que hacer, que era ganar, el resultado de Pontevedra sentó como un jarro de agua fría a los aficionados malagueños, que, pese al revés, despidieron a su equipo con aplausos a la conclusión de un encuentro sin historia, dominado por la escuadra azulona de principio a fin. Y es que el Trops tomó la iniciativa desde el mismo arranque.

Con solvencia y una defensa sólida, los malagueños mandaron desde el comienzo. El Mallorca intentaba imprimir velocidad en las acciones de ataque, pero el Trops había colocado un muro inquebrantable en la defensa con el que se estrellaba una y otra vez. El 18-11 con el que se llegó al descanso reflejaba la superioridad local.

La escuadra malagueña tenía controlado el choque y el banquillo comenzaba a interesarse por el resultado del Cisne-Guadalajara, que acabó ganando el equipo local 34-30 arruinando las aspiraciones del Trops.