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Comenzó a trabajar siendo muy joven para ayudar económicamente a su familia, y a día de hoy, tras una extensa etapa como jugadora y capitana ... del Costa del Sol Málaga, Pepa Moreno es una de las referencias del deporte malagueño, pero más que por su pasado en la cancha, por su papel como presidenta del club, porque por desgracia, aún son pocas las mujeres con altos cargos dentro del mundo deportivo. Lleva años rompiendo barreras, luchando dentro de un ámbito aún masculinizado, pero asegura que la tendencia ya está cambiando.
–¿Piensa que ha roto más barreras como presidenta que como jugadora?
-Sí, como jugadora era todo más fácil. Te centras en sus entrenamientos y partidos y no sabes lo que hay detrás del escenario, empecé a verlo en mis últimos años de jugadora, cuando empezaba a ayudar a Carmen Morales y veía la complicación de encontrar patrocinadores.
-Antes del balonmano, ¿qué era de usted? ¿A qué se dedicaba?
-Estudiaba las oposiciones para policía, pero mi madre se puso enferma y tuve que empezar a trabajar, porque ella necesitaba unos cuidados, una atención médica… Mi padre la cuidaba y yo salí a trabajar.
-¿Dónde llegó a trabajar?
-Pues trabajé en Famadesa. Era nuestro patrocinador del balonmano. Le comenté que tenía necesidad de trabajar y pasé la entrevista. Me levantaba a las 6 de la mañana y de allí me iba a los entrenamientos. Luego estuve en muchos trabajos: en Olimara, en un restaurante, en Aurgi, en Vodafone, vendiendo hierros… Ahí iba conociendo empresarios y les ofrecía el patrocinio de clubes.
-Y las primeras veces que tocaba a la puerta de las empresas, cuando el club no era ni la mitad de lo que es ahora, imagino que no le harían mucho caso, ¿no?
-Era complicado.
-Los patrocinios siempre llegan cuando comienzan los éxitos, ¿no?
-Bueno, ha habido un antes y un después con el tema del triplete especialmente, porque fue una cosa histórica. El día que nos llegó el patrocinio de la Diputación de Málaga fue un sueño.
-¿Ha habido momentos de frustración por la falta de apoyos para el deporte femenino?
-He tenido muchos momentos de frustración, de que no me cojan el teléfono… Y frustra porque yo trabajo para que mis jugadoras tengan un salario, una seguridad social, infraestructuras… Todo lo que yo no he tenido… Un mínimo.
-¿Siente que las mujeres tienen que demostrar siempre más que los hombres?
-Sí, eso sí es verdad. Pienso que nosotras siempre tenemos que dar más. Por ejemplo, estos últimos años es cuando han llegado los verdaderos apoyos, cuando hemos ganado 5 títulos, estado en 8 finales... Hemos tenido que romper muchas barreras y todavía quedan, tenemos que seguir luchando, pero podemos estar contentas por todo lo conseguido.
-Y en el mundo de la mujer directiva, ¿por qué cree que a día de hoy sigue habiendo tan pocas mujeres en esta esfera?
-Es un proceso que tiene que ir cambiando. Aunque es cierto que hay desigualdad, durante años, las directivas han sido círculos muy cerrados, pero ahora se están abriendo más a las mujeres.
-¿Y cree que, como algunos dicen, a las mujeres también les falta iniciativa para encarar este tipo de puestos?
-La sociedad está cambiando. Antes la mujer se dedicaba a la casa y los niños y ahora es autónoma, trabaja y hace de todo. El modelo está cambiando y eso es lo que está ayudando a que muchas mujeres vean que pueden estar en puestos directivos. Hace unos años era impensable.
-Cuando comenzaba a ejercer como presidenta, ¿alguna vez sintió que no se la tenía en cuenta por ser mujer?
-No, pero sí que he tenido muchos enemigos por ser mujer y tener un proyecto que ha dado sus frutos. Eso sí que lo he sentido, ese machismo y desprecio lo he sufrido. Como jugadora no he sentido esa discriminación, pero ahora sí.
-Es interesante que personas como usted formen parte del Comité de Igualdad del COE. ¿Por qué se lucha allí?
-Se debate sobre si las federaciones cumplen con las cuotas de mujeres en directivas, asignaturas pendientes como el fomentar el que las mujeres sean entrenadoras, plantear acciones para fomentar la igualdad en muchos aspectos, como el abandono del deporte, entre otros...
-¿En este Comité se ha tratado también toda la polémica en torno al expresidente de la RFEF, Luis Rubiales? ¿Cómo lo han vivido?
-Ha sido duro, ha habido compañeras que lo han pasado mal…
-Como deportista y mujer, ¿cuál es su opinión al respecto? Y, ¿qué opina sobre cómo está actuando la RFEF al respecto?
-Está claro que las formas no han sido correctas. He leído y escuchado mucho sobre cómo se han sentido las jugadoras y las comprendo perfectamente.
-¿Ha pasado por algo similar?
-Sí, yo he vivido esas situaciones, muy duras. El abuso de poder por ser hombre sigue existiendo. Yo viví una época muy dura que intento borrar y sobre la cual no quiero profundizar, pero yo sí he sufrido acoso.
-¿En el mundo deportivo o personal?
-En el deportivo. Así que las entiendo perfectamente. Su ilusión es la de representar a su país, que es lo más bonito que le puede pasar a una deportista. Por desgracia hay personas que se aprovechan de los sueños e ilusiones de las demás, como a mi me pasó. Piensas que nunca vas a estar en esa situación y pasa. Yo viví un año muy duro y no hablé ni dije nada por miedo. Pero me quiero quedar con lo positivo y borrar lo malo.
-¿Qué mensaje mandaría a las futbolistas?
-Que son unas valientes, porque yo en su día no tuve la valentía de contarlo. Me sensibilizo mucho con ellas porque yo lo he vivido, así que me parece genial que haya personas como ellas que le estén dando visibilidad a esto, para que las niñas del mañana no pasen por estas situaciones.
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