

Secciones
Servicios
Destacamos
Este Costa del Sol quiere seguir haciendo historia, rompiendo barreras y demostrando día a día que sus títulos y sus éxitos no son flor de ... un día. Contra todo pronóstico, el equipo campeón de Liga volvió a hacerlo; volvió a romper todos los esquemas para brillar en la segunda competición europea, la máxima a la que un equipo español puede acceder. No lo tenían fácil las de Suso Gallardo este domingo. En su tentativa por seguir creciendo en la EHF League, recibían en casa al 'coco' del grupo, un equipo procedente de una de las ligas más potentes del continente y que sólo había perdido una vez este curso. La segunda fue en el Martín Carpena (29-26).
Estableciendo el segundo mejor registro histórico del club en cuanto a espectadores, 3.058 personas convirtieron el Palacio de los Deportes malagueño en un absoluto infierno para el Motherson Mosonmagyarovari húngaro, popularmente conocido como Movar, actualmente tercero de su Liga y con una potente plantilla. Comenzaron ambos equipos como un tiro, con una energía desmesurada sobre la pista; eso sí, el Costa del Sol, siempre fue primero en el marcador y eso dio aún más confianza y fuerza a las 'panteras', la que necesitaban en un partido como ésta y la que les faltó en su último encuentro en el Martín Carpena, donde nada tuvo que ver su versión con la mostrada ayer… Por suerte. El cuadro de Suso Gallardo hizo ver que aunque debutantes en esta fase de grupos, no es un rival pequeño.
En el minuto 12, el Movar logró imponerse por dos goles por primera vez (6-8), pero no cundió el pánico entre las locales. Bajó entonces un poco la intensidad inicial y se focalizaron ambos equipos en reforzaron su defensa, especialmente el Costa del Sol. Por fortuna funcionó este ajuste defensivo y, unido a una incombustible Merche Castellanos bajo palos, por primera vez en el partido, se distanció el cuadro malagueño por hasta tres tantos: uno de Eli Cesáreo y dos de Bitolo (12-9), con los que enloqueció el Carpena. Pero, para sorpresa de todos, continuó la sangría. La brasileña Bitolo hizo la diferencia anotando el hasta cinco dianas en la primera parte, y aprovechando un balón robado en el área rival, Elena Cuadrado voló por la pista para fundir el +4 en las redes (14-10). Respondieron las húngaras, pero también lo hizo Bitolo, de nuevo. Fueron apoteósicos los minutos de la pivote, y en líneas generales, también los del Costa del Sol.
Y seguía la brasileña una y otra vez, disparando a discreción para aumentar la renta. Le acompañaba, al igual que en la primera mitad, la guardameta internacional, sencillamente impecable, de nuevo dejando huella como artífice del triunfo, poniendo en pie a la grada con cada parada. No podían relajarse las malagueñas ante un Movar que llegó a ponerse de nuevo a dos goles. Pero lejos de intimidarse, el Costa del Sol se creció como nunca. Este domingo les salía todo. Contra que articulaban, contra que acababa en gol… Así hasta lograr una ventaja de cinco goles (25-20). Una exhibición en todas las facetas del juego, un inmenso abanico de técnicas, de pases, de tiros, de paradas…
Dada la calidad del cuadro rival y la gestión de los nervios por jugar un partido tan importante en un escenario como éste, podría decirse que Málaga vivió el mejor partido del curso del Costa del Sol. Apretaron las húngaras en los últimos compases, reduciendo la renta de nuevo a dos goles. Pero se volcó el Carpena para llevar en volandas a sus jugadoras hacia el triunfo. Cerró el encuentro la capitana, Sole López, firmando un 29-26 que no sólo supone dos puntos más para la tabla, si no una inyección de moral y esperanza en su camino continental.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Los ríos Adaja y Cega, en nivel rojo a su paso por Valladolid
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.