Salvador Illa: «El verano de 2021 podría ser mucho más normal»

La primera parada del programa sería en el Centro de Investigación en Sanidad Animal y allí, junto al doctor y virólogo del Centro Nacional de Biotecnología del CSIC, Juan García Arriaza, comenzaría el periplo por el mundo de las vacunas. Desnudo llegaba al interior de las instalaciones y laboratorios y para llegar al interior de la cabina donde trabajan con el Covid-19 se puso el traje con cinturón de filtros especial, oxígeno y cubiertos de pies a cabeza. «Aquí los invitados son: el señor coronavirus, la señora vacuna y la ciencia», puntualizó Calleja.

Entran al box y en la cabina a -79º está el Covid-19. Juan García Arriaga, le enseña cómo trabajan en la vacuna, que hasta ahora es la vacuna española más avanzada y, para ello, le enseña dónde tiene guardado el virus. «Dentro de este líquido hay millón y medio de virus», aseguraba el virólogo. «Quiero saber cómo va la vacuna», le decía Calleja. «Si todo fuese bien a final de año está disponible esta vacuna», explica García Arriaza.

Entre los temas más hablados relacionados con la vacuna estaba la financiación y los sueldos de los científicos. Ante la pregunta de Calleja de si había notado incremento de dinero, Juan García Arriaza contestaba: «Al principio en abril estaba yo solo. Había falta de financiación, apoyo a la ciencia, pero parece que nos hemos dado cuenta de lo importante que es. Hay más concienciación por parte del gobierno», confesaba.

En los jardines del Centro Nacional de Biotecnología se sentaron junto a Calleja los veteranos y prestigiosos científicos españoles Luis Enjuanes y Vicente Larraga. «La efectividad está en el 60% ahora mismo», confesaba Larraga sobre la vacuna que está desarrollando. Ya jubilados, estos expertos siguen trabajando y luchando ahora por una vacuna que aseguran que, aunque llegue más tarde, será de las más efectivas: «Con esta vacuna no desarrollas ningún síntoma cuando alguien te tose, queda neutralizado con las mucosas. Estarán listas para el verano que viene», añade Luis Enjuanes.

Se mostraba la diferencia con otros países: «En Oxford son 100 científicos y reciben cien millones del gobierno y otros cien de la Unión Europea. Nosotros somos trece científicos y recibimos 600.000 euros», afirmaba Vicente Larraga. También hubo lugar para hablar sobre 'los negacionistas': «Hay gente que por ignorancia niega que exista el virus», apuntaba Enjuanes. «Los que piensan que metemos chip en las vacunas son perturbados mentales», señala Larraga.

La directora general de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, María Jesús Llamas, se sentó con Jesús Calleja y lo dejó claro: «Es la primera vez que ocurre un desarrollo tan rápido, pero es la primera vez que todo el mundo se ha unido para un esfuerzo común». «¿Cuándo llegará la vida normal?», le preguntó Calleja. «En verano de 2021», aseveró la directora. Sobre los datos del CIS de que el 50% de los españoles no se fía de ponerse la vacuna, la directora aclaraba: «Cuando las vacunas se autoricen se la habrán puesto 30.000, 40.000 o 50.000 personas...¿Cuántas necesitan para sentirse seguros?».

A Santiago de Compostela, concretamente al Centro de Investigación en Medicina Molecular y Enfermedades Crónicas, llegaba la siguiente visita. María José Alonso explicó todos los pasos que se están desarrollando para diseñar una vacuna que no necesite del frío para protegerse. «También vamos a intentar que no sea una inyección, sino unas gotas», aseguraba la científica. La visita a Biofabri, la única empresa con autorización para fabricar vacunas humanas en España, enseñó cómo son las instalaciones y qué pasará con la vacuna de Novavax, la más avanzada hasta ahora y que se está fabricando allí. «Ya las estamos fabricando para cuando den el visto bueno definitivo, empezar a distribuirlas. Si todo falla, habrá que destruírlas», comentaba el consejero delegado de Biofabri, Esteban Rodríguez.

La última parada de la noche era Moncloa. Aallí el ministro de Sanidad, Salvador Illa y el titular de Ciencia e Innovación, Pedro Duque, responderían también a las preguntas de Jesús Calleja. «Pensábamos que esto no iba a llegar. Pero en esto estamos todos, puedes tener la cartera llena o vacía, pero de esta o salimos o salimos», comenzaba Illa. Cuestionados por las vacunas y por las diferentes fases, los ministros lo dejaban claro: «Hemos comprado de momento siete vacunas. Cuando el primer ciudadano español se pinche ya habrá otros muchos que se las hayan puesto en las últimas fases de prueba», asegura el ministro de Sanidad.

Hablando de las fechas y la posible llegada de 'la vida de antes', Calleja preguntó sobre cómo estará la situación en febrero. A lo que contestó Illa: «A finales de febrero podríamos tener dos millones y medio de personas vacunadas. En mayo o junio, entre quince y veinte. El verano de 2021 podría ser mucho más normal», aseguraba el ministro. Aunque Pedro Duque añadía: «No hay un momento en el que todo el mundo de repente pueda hacer lo mismo que antes. Hay que tener en cuenta que hay que seguir cuidándose».

El tema de la Navidad y las comidas y cenas familiares también se puso sobre la mesa en Moncloa. Jesús Calleja quería saber qué podía hacer en estas fechas tan señaladas y el ministro de Sanidad le dio unos consejos: «No van a ser cenas multitudinarias. Hay que intentar llevar mascarilla el máximo tiempo posible, si puede ser al aire libre mejor, lávate las manos y evita que sean más de cinco horas», señaló Illa.

Pero si hay algo que tenían claro los ministros es que no hay que confiarse. «Porque haya vacunas no nos podemos venir arriba. Hay que mantener la guardia», advertía el ministro de Sanidad. «Cuanto más cumpla uno las restricciones actuales menos habrá que poner en un futuro. La ciencia es la que nos está sacando y sacará de esto», completaba Duque. «Las vacunas salvan vidas», añadió Illa.

Calleja les habló sobre las inversiones de España en investigación, que andan muy por debajo de la media europea: «Invertimos 1,24 mientras que la media está en 2,6», destacó el leonés. «En unos dos años queremos estar en esa media. Los nuevos presupuestos suponen un 60% de incremento en I+D+I», contestó Duque.

Para terminar, el aventurero hizo de las suyas y subió junto al doctor Juan García Arriaza (solo le falta el Everest para subir las siete cumbres más altas del mundo) al Pico Espigüete (Palencia). Al llegar se sentaron y reflexionaron: «Gracias a vosotros, gracias a la ciencia, gracias por quedarte en España y no haberte ido. Gracias amigo», se sinceraba Calleja con el virólogo para terminar esta especial entrega sobre las vacunas, la ciencia y el Covid-19.