Paloma Picasso, la hija menor del genio malagueño, asume la gestión del patrimonio del artista

Paloma Picasso, de 74 años, es hija del pintor malagueño fallecido en 1973 y de la artista francesa François Gilot, fallecida el mes pasado.

La Sucesión Picasso pertenece de forma indivisa a Claude y Paloma Picaso y a los nietos del artista Marina Picasso, Bernard Ruiz-Picasso y Olivier, Diana y Richard Widmaier-Picasso.

Esa entidad ostenta el monopolio de los derechos de autor y de reproducción de las obras del maestro y gestiona los derechos de la personalidad, el derecho moral y los derechos de marca.

Entre sus atribuciones figura la autentificación de obras y la lucha contra falsificaciones mediante acciones judiciales.

Estos últimos años, consiguió recuperar 271 dibujos en poder de un antiguo electricista del artista, que aseguraba haberlos recibido de regalo de su viuda.

En 2019, el exelectricista y su esposa fueron condenados a dos años de reclusión en suspenso.

Claude Ruiz-Picasso, de 76 años, al frente de la entidad gestora desde 1989, decidió retirarse y transferir la responsabilidad a su hermana, indicó el abogado de esta última.

El creador de obras que marcaron el siglo XX como «Guernica» y «Las señoritas de Aviñón» sigue fascinando.

Museos de todo el mudo, y sobre todo de Francia y España, tienen programado este año una cincuentena de exposiciones de su obra, en el cincuentenario de muerte.