Opino «de que»

Muchos creían que iban a ver a un grupo de culto y se encontraron el llenazo. «Hay que ver, estamos todos los frikis de Málaga», me dijo una amiga al encontrarnos (sinceridad no pedida). Pero el término no hace justicia, pues allí había de todo: desde biólogos a profesorado de varios niveles educativos, pasando por personal sanitario, aeroportuario, periodístico, varios cuerpos electorales de la UMA y hasta catadores de aceite de oliva. Una multitud variopinta aficionada al 'subnopop', estilo musical que explota tonterías musicales para ilustrados.

Con ironía fina, un poquito de nostalgia ochentera y psicodelia con mijita de punk, 'Ojete' lució algunas de sus mejores letras como 'Gente que imita mal los acentos' o 'Tonta Gilipó', que cerró el concierto antes del bis versionado de 'Como yo te amo'. Temas propios y versiones impagables como 'Agapimú', 'Bailar pegados' o 'Quién maneja mi barca', con dos lanchas neumáticas en las que fueron navegando literalmente sobre el público. Una clase folclórica magistral de cómo tomarnos menos en serio, ah, soltando cositas en serio, estilo «¿Aquí en Málaga no conocéis el concepto de contaminación lumínica?», como diciendo. Dijeron más palabras bárbaras, pero si quieren hacerse una idea lo mejor es que escuchen sus canciones.