C. Tangana se deja querer en Starlite

C. Tangana se hizo de esperar y Starlite –que se llenó para esta primera cita de verano en la décima edición del festival– estuvo esperándole casi cuarenta minutos. Al ritmo de marcha de Semana Santa se abría el telón que escondía alrededor de 30 personas sobre el escenario y unas cuantas mesas y sillas como si de un restaurante se tratase. «¿Nos tomamos un trago a la salud de to' esta gente que ha venido a vernos o qué?», insinuaba C. Tangana unos minutos antes de tomarse la primera copa de la noche: «¡A su salud!», brindaba mirando al público de Starlite elegante para la ocasión: un traje azul de cuadros y unas gafas negras que más tarde se quitaría.

Más de 3.000 personas se confesaban como si la cantera de Nagüeles fuese una iglesia. «Yo era ateo, pero ahora creo porque un milagro como tú ha tenido que bajar del cielo», gritaban al firmamento marbellí. Llegaba el tema, 'Ateo', en el que El Madrileño subió a Lucía Fernanda –hija de Antonio Carmona– a cantar el tema con él ante la ausencia de Nathy Peluso. Después de esto, una monja subió al escenario e hizo todo lo que se podía hacer en esta fiesta que montó C. Tangana para conquistar a Starlite: se echó una copa, se la bebió de un trago y se encendió un cigarro. Y le plantó un beso a uno de los que estaban sentados en las mesas del restaurante del escenario.

Muchos eran los que acompañaban a El Madrileño en Marbella, pero enseguida montó su mesa de amigos para hacer los momentazos de la noche. Terminaba el tema 'Demasiadas mujeres', con el que el público se ponía en pie para ya no sentarse en ningún momento y se escuchaban ya las palmas de fondo al puro compás flamenco. «Me, me, ma, me maten...», entonaban los fans. Y la mesa más grande de la noche reunía a Niño de Elche, La Húngara y parte de la familia Carmona. «Yo sin esta gente, ¿pa' qué cojones quiero pasar?», dice la canción que nadie dejó de cantar en Marbella en la primera cita de C. Tangana con Starlite.

Ya solo quedaba un gran grupo de amigos cantando, bailando y disfrutando a su aire en un sarao flamenco. 'No estamos lokos' de Ketama, 'Mala, malita, mala', de La Húngara o 'Noches de bohemia' de Navajita Plateá. La actuación de C. Tangana en Marbella estaba siendo, sin duda, ingobernable, como el título de una de sus canciones que no faltaron en esta cita. Mientras, el público se convertía también en ingobernable con bailes insaciables para cada canción que C. Tangana interpretaba. La gran pantalla en la parte superior del escenario hacía que el concierto pareciese totalmente una película, con escenas que rodeaban al cantante y paseaban por todo el restaurante que El Madrileño había montado.

Se subía a la mesa para cantar 'Tranquilísimo' con las gafas de sol puestas y esquivando los vasos, copas y botellas de anís que tenían para beber en la juerga que había montado. 'Nunca estoy' ponía un toque nostálgico en la noche y con 'Tú me dejaste de querer' continuaba el drama. «Tú me dejaste de querer cuando menos lo esperaba, cuando más te quería se te fueron las ganas», cantaba. Esa dedicatoria seguro que no iba para Starlite, que quiso y se dejó querer por C. Tangana en la primera cita del verano. Se acariciaron mucho y las caricias siguieron en la velada. El cariño llegó y 'Antes de morirme', tema que interpretaba junto a Rosalía cuando era su pareja, iba a ser de las últimas dedicatorias que El Madrileño haría.

Con 'Un veneno' era otro de los temas con los que decía 'hasta luego': «Lo hice por ti, lo hice por ti», cantaban para despedirse. No era un adiós, era un hasta pronto. Hasta el 12 de julio.