Pueblos blancos con ritmo tejano

Serán cuatro días de conciertos al aire libre mañana, tarde y noche (según la jornada y el lugar) con una veintena de bandas llegadas en su mayoría de Austin, Houston y Nashville, pero también de Costa Rica, Reino Unido, Brasil y México; e incluso del mismo Montejaque. En su repertorio, mucho rock, blues, country, tex-mex, jazz, funk y R&B que sonarán en lugares con encanto, como el auditorio enclavado en el balcón del Tajo de Ronda con impresionantes vistas al valle y en la pintoresca plaza del Ayuntamiento de Montejaque. Este pueblo volverá a ser el campamento base de la cita, donde se alojan los músicos y el único escenario con conciertos matutinos sábado y domingo acompañados de paella. En Ronda, habrá actuaciones todos los días, salvo el viernes 9 de agosto. Como previa a la fiesta, el 7 de agosto se celebrará un concierto de rock en el Arena Marbella con Burning, La Frontera, Rubén Pozo y Lichis, junto con tres de las bandas del festival.

Para algunos de los grupos esta será su primera actuación en España, una plataforma que les sirve de vía de entrada a Europa. Este año se estrenan en el cartel –y en el país– Los Skarnales (Houston), con 25 años de experiencia mezclando ritmos como la cumbia y el reggae con el rock and roll; Tamara Mack (Austin), vocalista que transporta a los años dorados del soul; y Donovan Keith (Austin), recientemente premiado como mejor artista emergente de la ciudad tejana por el colectivo de mecenas Black Fret.

Pero quien lo prueba, repite.Y ahí están las pruebas. El sabor andaluz de estos rincones y la energía del público ha enganchado a músicos ya reincidentes en el festival como el maestro del tex-mex Joe King Carrasco (Mano Negra tiene una versión de su 'Patchuko Hop' y hasta Michael Jackson cantó uno de sus temas), la promesa tejana Oscar Ornelas y la cantautora costarricense Maf É Tulà (que debutó el año pasado en el festival). También a bandas como la de Brian Ashley Jones (guitarrista de Nashville cuyas canciones han sonado en varias películas) y The Jake Levinson Band (una alianza entre Austin y Guatemala que conoce Pueblos Blancos Music Festival desde la primera edición).

Ampliar

Detrás del «festival menos previsible del país», en palabras de sus organizadores, están Josu Camacho, gerente de Perform in Spain; el músico y filósofo Phil Plata y Juan de Castro, miembro de la Fundación Sierra de Líbar y gestor de la Oficina de Turismo de Montejaque. Todo nació en un viaje de Josu Camacho a Austin, en el que se quedó fascinado con la forma de vivir la música en directo en aquella ciudad. Allí tuvo un encuentro fortuito con Phil Plata, que no dudó en subirse a un avión para conocer esos pueblos blancos de los que les hablaba Josu. Y surgió la idea: trasladar la experiencia musical de Austin, Nashville y Houston al mágico escenario de la serranía andaluza; una aventura a la que se incorporó Juan de Castro. Sin patrocinios, solo con el apoyo de los ayuntamientos respectivos y las diputaciones de Málaga y Cádiz, Pueblos Blancos Music Festival resiste en la agenda veraniega como un encuentro musical de curiosos contrastes.