El puertorriqueño Luis Fonsi no defraudó a sus incondicionales y ofreció un 'show' de lo más variado en la noche de este pasado sábado, en el penúltimo concierto de la 63.º edición del Festival de la Cueva de Nerja. Durante casi dos horas repasó ... sobre el escenario del auditorio Manuel del Campo, en los jardines de la cavidad, algunos de sus grandes éxitos, dentro de una gira con la que está celebrando sus primeros 25 años en el mundo de la música.
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Ante un público entregado, que no dejó de corear todas y cada una de sus canciones, Luis Alfonso Rodríguez López-Cepero, conocido artísticamente como Luis Fonsi, apareció sobre el escenario cuando el reloj marcaba las 22.38 horas. Con una puesta en escena espectacular, con enormes pantallas, luces y sonido, el artista, vestido de riguroso negro, se arrancó con 'Corazón en la maleta'.
Fue el inicio de un viaje sonoro y audiovisual, incluso con un vídeo en el que se repasaban distintos momentos de su vida, en el que Fonsi se mostró, en todo momento, muy cercano al público, de todas la edades, desde familias enteras a jóvenes y mayores. Ninguno quiso dejar pasar la ocasión para bailar y, al mismo tiempo, emocionarse con las letras del artista que desde los diez años vivió en los Estados Unidos, a donde emigraron sus padres, concretamente a Orlando.
«Han sido 25 años de carrera, llenos de amor, de aprendizaje y de canciones, románticas y rítmicas», expresó Fonsi tras cantar 'Pasa la página' y 'Vacío'. «Empecemos por el principio de todo, para mí era un sueño el poder cruzar el charco. El comienzo de todo fue cuando empecé a escuchar en la radio de aquí 'Imagíname sin ti'», añadió el artista puertorriqueño, conocido mundialmente con su tema 'Despacito', de 2017.
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Sin embargo, su gran 'hit' lo dejó para el final, siendo el colofón a una noche calurosa, en la que las canciones de Luis Fonsi subieron aún más la temperatura. Había quienes no dejaron de bailar y otros que lo hacían solo con los temas más animados. Los que estaban delante del escenario se movieron mucho más que los que siguieron el concierto sentados desde las gradas. Eso sí, hubo temas como 'Calypso', 'Échame la culpa' o el mencionado 'Despacito' que los levantaron de sus asientos.
Fonsi explicó que último disco, 'El Viaje', dedica una canción a distintas ciudades del planeta, pero que solo una lleva el nombre de una región, 'Andalucía', una tierra muy especial para él, ya que está casado con una cordobesa, Águeda López, con la que tiene dos hijos, de 13 y 8 años, que ayer estuvieron entre el público. A la mayor, Micaela, le dedicó incluso una canción, 'Imposible', «porque soy el hombre más afortunado del mundo», dijo.
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«¿Bailamos?», preguntaba el artista como preludio a una serie de ritmos de lo más movidos, un 'medley'. «Ha sido una noche muy bonita, es un buen momento para despedirnos, mañana hay que trabajar, así nos ahorramos el tráfico y hay que dormir ocho horas, ¿les parece?», aseguró Fonsi. Pero el público, con un aforo completo, de unas tres mil personas, querían más. Otro 'medley' aún más movido, con letras en inglés, fue el preludio a la despedida, en la que sonaron 'Échame la culpa' y 'Despacito'.
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