Easy Rider, 33 años en la cresta de la ola del heavy metal progresivo

Ellos son Javier Villanueva, Daniel Castellanos, José A. Villanueva y José Roldán, con la portentosa voz de Dess al frente del escenario como novedad en 2020. Easy Rider es un proyecto longevo y con algunos cambios en los integrantes y parones para el descanso, pero ha sabido adaptarse a los cambios generacionales y su objetivo sigue intacto: seguir en la ola del metal y continuar en ese podio en el que se encuentran. Este sábado 13 de marzo llegan a Málaga, la ciudad natal de la cantante, donde se enfrentarán a un público con mascarilla y la debida separación en la Cochera Cabaret mientras ellos hacen lo que mejor saben: música para disfrutar, aunque sea sentados.

Hablamos con Dess Díaz para conocer los detalles de esta cita que comienza a las 19.30 horas y para la que hay muchas expectativas.

–¿Cómo empieza su aventura con Easy Rider?

–El grupo ha tenido dos cantantes en todo este tiempo: Eugenio Garañeda y Ron Finn. Este último era de Estados Unidos, así que al principio por el tema de la distancia estaba muy complicado. Después se lanzaron a buscar vocalista y batería a través de las redes sociales. Yo soy muy fan del grupo desde siempre y vi ese anuncio y dije «¿por qué no intentarlo?». A los pocos días se pusieron en contacto conmigo para el proyecto.

–Tras incorporarse a una banda reconocida por la voz masculina de sus intérpretes... ¿Cuáles fueron sus impresiones?

–No noté diferencia cuando llegué... Ellos tenían más expectativas por los seguidores del grupo que por mí, no por el hecho de que fuese mujer, si no por el cambio de sonido, que podía chocar. Fue al revés, me dieron una bienvenida brutal y se ha encajado genial. En 2020 grabamos un videoclip en Madrid y fue el primer día que nos vimos. La sensación fue que nos conocíamos de toda la vida... Hubo mucha química en ese primer contacto y era como una más del grupo.

–¿Cómo fue ese primer encuentro entre el grupo y usted, la nueva vocalista malagueña?

–Fue en julio de 2020, cuando nos dejaron ese ratito para salir y seguir con nuestras vidas. Todo salió genial, porque regrabamos un tema de un disco antiguo y quedó un sonido muy potente y actual. El videoclip, 'Evilution', es una pasada, realizado por Mario Ruiz.

–¿Cómo son los ensayos con la distancia entre Madrid y Málaga?

–Hacemos muchas videollamadas, nos pasamos ideas de los temas mediante archivos... Si tenemos algún concierto fuera o cerca de Madrid me quedo unos días más y aprovechamos para ensayar juntos. En cuanto a los ensayos más tradicionales, ellos se reúnen allí en Madrid para ensayar, me pasan los temas sin voz y yo los interpreto en casa. No hay otra alternativa en estos momentos.

–¿Cree que se puede vivir de la música en estos tiempos de pandemia?

–La música ahora no da para vivir, hay que tener un plan B. Otro trabajo aparte y cuando se tienen los conciertos organizar para poder cuadrarlo.