La despedida de Danza Invisible en Torremolinos agota entradas y se traslada al Estadio del Pozuelo para ampliar aforo

Se veía venir ya, cuando, el pasado lunes, el concierto de Danza Invisible en Torremolinos, el próximo el 8 de junio, registró un 'sold out' para su ubicación original, la Plaza de Toros. Ante las grandes expectativas generadas, se ha decidido cambiar el recinto, a uno de mayor capacidad, como es el Estadio Municipal del Pozuelo, gracias a la colaboración del Ayuntamiento. La Administración local, por lo tanto, pone las instalaciones deportivas a disposición de este directo, que se antoja, por la parte corta, memorable. Así lo confirman fuentes de la organización de este broche de oro en Málaga para Danza Invisible, el epílogo de la gira 'Sin decir adiós', 12 conciertos en 12 ciudades de toda España, para rendir homenaje y disfrutar de una de las mejores bandas del último medio siglo en el país.

Con el estadio, se multiplica el aforo de forma importante, lo que permitirá que puedan adquirirse de nuevo entradas para que nadie se quede sin desgañitarse coreando los éxitos del grupo liderado por Javier Ojeda y que fundó, hace ya 40 años, Ricardo Texidó.

Una oportunidad única para torremolinenses, y también para todos aquellos que quieran ser cómplices de un momento para la historia, con Danza Invisible jugando en casa, de revivir algunos de los 'hits' que han marcado la música española, como 'Sin aliento', 'Agua sin sueño', 'Reina del Caribe' o 'Sabor de amor'; una comunión musical con un conjunto que combina un sonido que, en sus orígenes, recordaba a Simple Minds, The Police o Talking Heads, y que evolucionó, sin renunciar a nada, hacia un estilo deudor de la música africana, más bailable y con ingredientes tomados del Caribe.