Bonnie Tyler, la música por encima de todo

El público lo da todo para recibir a una de las reinas del género. Después de su interpretación de 'Flat on the Floor' uno duda de si esta mujer tiene 70 años. «Buenas noches, esta es la primera vez que vengo a Starlite y espero volver muchas más veces», le dice a los asistentes antes de comenzar con 'Hold On'. Será la edad o la gripe, pero la galesa se siente cohibida y no arriesga con la voz.

En la cantera marbellí se congregaron este sábado unas 2.000 almas melancólicas en torno a la figura de Bonnie Tyler. Algunos se atrevían a bailar al más puro estilo de los 70 y 80 cuando iban a por sus refrigerios. Estaba claro que venían a disfrutar de una de las mejores viejas rockeras, y no por haber cancelado el concierto del día anterior, sino por escuchar esa voz tan característica y esa melodía tan 'vintage'.

«¿Alguna vez habéis cantado en la lluvia? Pues venga, todos a cantar conmigo», dicho y hecho mi capitán. Es verdad que solo un 5% se atrevieron con toda la letra, pero vaya cómo sonaban los estribillos… «Sonáis genial», sentenció. «Con todo el tema este del Covid-19 no hemos podido ensayar, bueno lo hemos hecho a nuestra manera. La prueba de sonido ha sido clave», admite la septuagenaria. Cualquiera lo diría...

La flamante protagonista del sábado en este festival de Starlite no dejó a nadie insatisfecho, cantó sus grandes viejos éxitos, pero los músicos se mostraron orgullosos de todas sus obras. También exhibió algunos trabajos más novedosos como 'Rocks and Honey' (2013). 'Between the Earth and the Stars'. Y así hasta llegar al muy reciente 'The best is Yet to Come', que para alguien con 70 años es un título que... ¿ilusiona?

Después de décadas, Bonnie conserva en (des)perfecto estado esa voz única, que mantiene al hablar. Esto se debe a un terriblemente buen desastre: Gaynor Hopkins, nombre real de la cantante, sufrió de joven una operación de cuerdas vocales que salió peor de lo esperado… y le estropeó para siempre la voz de esa manera tan singular. Lo que tenga que ser será, no hay quien le ponga trabas al destino. «A mí me descubrieron cuando cantaba en Swansea, un ojeador de talentos vino al local a ver a otro cantante, se equivocó de planta y me escuchó a mí», desvelaba la británica. Lo dicho, el sino y sus cosas.

A día de hoy, la cantante ha perdido algo de tesitura y no se atreve con las notas altas de sus de sus títulos más característicos, 'Holding out for a Hero' y, claro, 'Total Eclipse of the Heart', 'Turn Around'. Antes de dar paso a 'Between the Earth' quiso agradecer a los tres médicos y enfermeros que le ayudaron a «sentirse mejor y poder dar el concierto de hoy».

La visita a Marbella de la galesa no era más que una muesca que añadir a la mochila de viajes y conciertos que lleva a la espalda. Una carrera profesional que sobrepasa ya con holgura el medio siglo. Lleva subida en los escenarios desde los 17 años. En todo este tiempo nunca se había visto con un parón tan largo como el de la pandemia, 16 meses. Quizá eso fue una de las claves para que la voz empezase a cansarse en la última media hora de concierto.

Ya con la gente en temperatura, Bonnie Tyler se atrevió a compartir sus pensamientos: «Ahora os preguntaréis, ¿por qué cantas una canción de Tina Turner? Bueno, en realidad es mí canción, yo la grabé dos años antes. Así que ahí va la versión original de 'Simply the Best'», expuso. El público no defraudó y la siguió, pero solo en los estribillos. Cabe recordar que este temazo consiguió superar a otra reliquia musical como 'The Wall' de Jimmy Hendrix.

Otra cosa no, pero tablas le sobran, después de amagar con irse, Bonnie Tyler volvió para presentar a todos sus acompañantes del escenario, los técnicos y su marido, Robert Sullivan, con beso incluido.

Todavía quedaba tiempo y energía para cerrar con 'Hero', sobra decir lo eufórica que se puso la grada. Y para despedirse 'Older'. El 'set list' no podía estar mejor escogido, es algo que te da la experiencia.