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Bob Dylan protagonizó en 1999 en La Malagueta un recital inolvidable ante más de 8.000 personas, con una sobria apuesta por una faceta menos folk con la que dio salida al mejor rockero y bluesero de la historia gracias a un repertorio de una veintena de grandes canciones con las que viajó por los años 60 y 70. Con su guitarra, con la armónica y con su voz, Dylan fue alternando sus canciones de finales de los 90 con sus temas más antiguos, ya que hubo espacio para el 'Stuck Inside of Mobile With the Memphis Blues Again' o el 'I Want You', ambas del 66, o para el más reciente por aquel entonces 'Til I Fell in Love with You'.
Sonaron himnos como 'I Shall Be Released', para dar paso después a un fin de fiesta con 'Highway 61 Revisited', 'Love Sick', el sesentero 'Leopard-Skin Pill-Box Hat' y, cómo no, su gran clásico atemporal: 'Blowin' in the Wind'. Su actuación formaba parte de una gira que el cantautor realizaba por nuestro país bajo la denominación de 'Never Ending Tour'. Sin grandes artificios ni efectos especiales, el poeta de la canción se metió en el bolsillo a un público que supo reconocer cada canción, sobre todo sus alegatos antibelicistas 'Masters of War' y 'Desolation Row'.
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