Ana Mena, presencia explosiva «desde Málaga para el mundo»

La cuenta atrás comenzó puntual en los jardines de las Cuevas de Nerja. Marcaban las 22.30 horas cuando los músicos de la artista ocupaban sus posiciones bajo la oscuridad del escenario. Un elenco de seis bailarines vestidos de blanco salieron enérgicos para dar pistas de lo que mostrarían respaldando a la malagueña. En seguida salió la protagonista de la noche, con una falda pantalón extra corta, un 'crop top' de cuerdas y unas botas blancas de infarto al estilo muñeca Bratz: nada podía salir mal cuando el concierto comenzó con una coreografía perfectamente sincronizada. 'Un beso de improviso' dejó a la artista sin aliento en la primera canción, pero es que el baile que tenía preparado para los tres primeros temas era para premio.

Una dicharachera Ana Mena no tardó mucho en dirigirse a su público, unas 2.400 personas, encontrar entre el tumulto a su «gente de Estepona» y avisar de que pondrían «patas arriba los jardines de la Cueva»: «¡Qué maravilla! Estoy súper feliz de estar en mi tierra. ¡Desde Málaga para el mundo! Llevaba esperando este concierto mucho tiempo, era el que más ilusión me hacía de los que teníamos apuntados este verano», confesaba sonriente.

'Solo', el tema que la artista lanzó con Maffio y Omar Montes llenó de nuevo el escenario de movimiento, aunque hubo tiempo para coger aire con algún que otro primer tema de su carrera más cercano a la balada.

Uno de los momentos más personales e íntimos del show llegó cuando Mena comenzó un monólogo divertido contando la historia de un amor frustrado que le dio para escribir un tema. 'Me he pillao por ti' fue un adelanto en directo de lo que se podrá escuchar próximamente en su disco, que además, buenas noticias, «le queda poco». Volviendo a su historia, la artista contó cuando conoció a su último 'crush' en Italia, y aunque el chico tenía novia en su momento, Mena no dejó de cotillearle su cuenta de Instagram por si se quedaba soltero. No cayó esa breva, pero al menos le dio para canción.

Tras este paréntesis de confesión, 'Música ligera' levantó a su público de Nerja que gritaba eso de «¡ponme algo de música ligera porque me siento ausente!», que a pesar de su mensaje algo más melancólico dio para baile: «Cuando nos decidimos a sacarla fue una apuesta arriesgada», que finalmente obtuvo el resultado esperado: que emocionara.

La explosión Ana Mena llegó a uno de sus puntos más álgidos con 'Las 12', su último tema con Belinda que, además, ayer la artista anunció que se convirtió en disco de oro. Lo cierto es que en el escenario no hubo 'zombies' como en su videoclip, pero el cuerpo de baile siguió acompañándola para no dejar ni un minuto de show sin fiesta.

A sus fans le quedaban ya poquitos temas que entonar junto a la artista, pero los últimos que completaban su 'set list' eran de los que hacían mover las caderas y la melena (más si cabe). 'Se iluminaba', uno de sus éxitos más polivalentes, fue el culmen perfecto para una noche brillante y llena de purpurina hecha canción, aunque un enérgico '¡otra, otra!' trajo de nuevo a la artista y a su banda al escenario (y también a miembros de su familia) para repetir 'A un paso de la luna', el modo que mantuvo durante toda la noche.