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cristina pinto
Jueves, 1 de julio 2021, 00:18
Al empezar el día en el que volvería a sumar un momento especial a su carrera lo confirmaba: «Vamos, que yo ya he cumplido ... todos mis deseos en Málaga», aseguraba el organista titular de la Catedral de Málaga, Adalberto Martínez Solaesa. «El Conservatorio, la Universidad y la Catedral», continuaba la frase. Esas palabras fueron dichas a eso de las once de la mañana de ayer y, unas horas después, sobre las 19.30 horas, llegaría otro logro para él: la toma de posesión como académico numerario de la Sección IV de Música de la Real Academia de Bellas Artes de San Telmo.
«Me siento abrumado por haberme elegido miembro de esta institución tan importante en nuestra ciudad, en Málaga», comenzaba su discurso sobre el altar de la Catedral. Y se refiere a ella como «su ciudad» porque, aunque naciese en Soria en 1937, asegura una y otra vez entre risas que ya tiene derecho «a ser de Málaga». Eso lo dice después de contar toda su historia en la capital de la Costa del Sol, desde que llegó en el año 1978 por una oposición para una plaza de órgano. «A pesar de que me dieron una oportunidad para trasladarme a Madrid, no me he querido mover de aquí. Mi mujer, de La Rioja, y yo, de Soria, estamos más que felices de que el destino fuese Málaga», valoraba en sus palabras el organista.
Desde el año 2003 es el organista titular de la Catedral de Málaga y casi veinte años después recibe este título que tanto reconoce su larga y completa carrera profesional: comenzó con sus estudios musicales en el Real Conservatorio de Música de Madrid y todo le llegaba de herencia de su padre, tal y como el propio Adalberto Martínez confirmaba recordando sus inicios: «Mi padre era sacristán-organista en un pueblo de la provincia de Soria y yo ahí ya quería tocar el órgano todos los días. Por eso empecé por el piano».
A partir de ahí, todo fue en crecimiento: Premio de Honor del Real Conservatorio de Madrid; Premio Nacional de Música Fin de Carrera; actuaciones en el Teatro Real de Madrid o el Palau de la Música de Barcelona; colaboraciones con la Orquesta Sinfónica y Coros de RTVE; catedrático de Historia de la Música y director Secretariado de Cultura de la Universidad de Málaga; catedrático numerario de Órgano del Conservatorio Superior de Málaga; licenciado en Filosofía y Letras por la Universidad Complutense; doctor en Musicología por la de Granada y un sinfín de logros que atesora en su vida profesional y personal.
El momento que marcó ayer la diferencia en la toma de posesión como académico de San Telmo fue la visita virtual que Adalberto Martínez hizo a través de un vídeo donde se pudieron ver todos los entresijos del órgano de la Catedral de Málaga que, como decía el organista, es el sitio más fotografiado por los turistas al entrar a este monumento.
Cualquier truco, cualquier esquina o curiosidad del interior de este instrumento fueron explicadas por Adalberto Martínez de forma detallada, como cuando hablaba de los diferentes registros que tenía a su disposición. «Hay 107 en total, son tiradores de registro que equivalen a un violín, viola, corneta, flauta travesera... Diferentes timbres y tesituras para elegir», explicaba el organista desde el interior.
El culmen perfecto llegó cuando terminó la visita virtual guiada al órgano de la Catedral de Málaga. Con la medalla recién colgada en la toma de posesión, subió a su sitio favorito de este lugar y sus dedos hicieron magia para hacer sonar este instrumento ante el silencio de los allí presentes, deseosos de escuchar cómo sonaba el órgano tocado por Adalberto Martínez. Se escuchaban las primeras notas. 'Diferencias sobre la gaita' y una Fanfarria Imperial de Antonio Soler fueron los temas con los que el organista de la Catedral quiso agradecer este otro deseo cumplido en su ciudad. «Ha sido espléndido», concluía el obispo de Málaga, Jesús Catalá.
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