“En el caso de duplicidad de entradas, Ticketmaster afrontará la devolución a los afectados en el concierto de Juan Luis Guerra”

Miles de personas llegaron ilusionadas al Auditorio Cortijo de Torres ayer. Juan Luis Guerra volvía a Málaga años después para ofrecer un concierto con motivo de su última gira. Lástima que se viera empañado por las decenas de quejas de fans, que habían comprado su entrada en una zona privilegiada, las gradas más cercanas al escenario, y tuvieron que sentarse en las escaleras del auditorio local porque otros asistentes habían ocupado su lugar. El problema reside en la numeración errónea de las localidades, ha aclarado Julio Alberto Gutiérrez, gerente de Taquillanet Producciones, a SUR este miércoles. Según explica, se habrían expedido entradas con el mismo número de asiento, aunque distinto código, por lo que no son entradas falsificadas, desde la plataforma Ticketmaster. Hasta este jueves no sabremos el motivo de este error, pero en el caso de duplicidad, afrontaremos la devolución del coste de la entrada a la persona que nos enseñe su ticket, ha explicado César Blanca, director de ventas de Ticketmaster Spain.

Rocío Chamizo, que compro su entrada por 59 euros con dos meses de antelación, tuvo que sentarse en los aledaños de la grada A porque alguien había ocupado su lugar. El encargado de comunicación me dijo que Ticketmaster había vendido entradas duplicadas, cuenta Chamizo, que se queja de la pésima respuesta por parte de la organización anoche. La gente optó por colocarse en asientos ajenos o irse a otra grada para coger sitio, esclarece Gutiérrez, que cree que ese fue el motivo principal del revuelo formado poco después de que la gente se enterara de que tenía entradas con la misma numeración que otras. Es cierto que hasta que no detectamos el error no nos pusimos manos a la obra con la reubicación. Pido disculpas, ha admitido Gutiérrez, que comentó que abonará el precio total a dos personas que se marcharon sin ver el directo.

Para algunos esta reubicación fue injusta, puesto que ellos habían pagado una cantidad por encima de la que habían abonado las personas que se encontraban a su lado. Nosotros adquirimos entradas en la primera fila, grada A, y después vimos el concierto en el suelo más atrás, reitera una y otra vez Rubén, otro de los afectados, al otro lado del teléfono. Hoy he puesto una queja en Consumo, me tienen que devolver el dinero, exige Rubén, que se queja de la poca respuesta por parte de la organización. Según Gutiérrez, al acabar el concierto sólo habrían recibido un total de 17 reclamaciones. Sin embargo, Chamizo contradice esta versión: Mi queja fue la última del libro de reclamaciones, así que es imposible que sólo hubiera una quincena de reclamaciones.