La huelga de trabajadores vuelve a dejar al MPM sin la exposición estrella del 'Año Picasso'

Minutos antes de la apertura, más de medio centenar de visitantes ya hacían cola ante la sede del MPM, aunque cuando comenzaron a acceder supieron que solo se podían visitar las salas de los fondos propios de la pinacoteca ya que la muestra temporal, la primera que se dedica en España a la exhibición en exclusiva de la escultura de Picasso, no estaba disponible. Según el comité de empresa, la librería y la cafetería tampoco abrió por el seguimiento de la huelga que fue secundada por el 75% de los trabajadores, una cifra casi idéntica a la del primer paro parcial que tuvo un respaldo del 73%. En la jornada de ayer, no hubo guerra de cifras ya que el MPM no facilitó su valoración sobre el apoyo de la huelga.

Con el estallido de este enfrentamiento, la pinacoteca afronta la situación laboral más conflictiva de su historia coincidiendo con la celebración del 'Año Picasso', al que se une además la conmemoración por el vigésimo aniversario de la apertura del propio museo en el Palacio de Buenavista. Los representantes sindicales señalaron que 84 personas de la plantilla estaban convocadas ayer al paro, un llamamiento del que estaban excluidos los empleados eventuales de atención al público «para no perjudicarles de cara a próximas contrataciones». Este personal es el que permitió ayer al museo abrir parte de sus dependencias. Las colas de visitantes se mantuvieron a lo largo de la jornada, aunque el acceso de público se desarrolló con normalidad.

El momento álgido de la protesta llegó a mediodía con la lectura del manifiesto de los trabajadores por parte de la presidenta del comité de empresa, Pepa Babot, que denunció el bloqueo y los «oidos sordos» de los directivos del Picasso después de ocho meses de negociaciones y «20 años considerando este museo nuestra segunda casa». «Hemos hecho cuantos esfuerzos económicos se han requerido y son muchos, hemos hecho cuantos esfuerzos horarios se nos han pedido y son muchos, y lo que nos dicen es que como sigamos con nuestras peticiones, será peor», se lamentó la representante, que pronunció su reivindicación en español y en inglés para que también llegara su mensaje a los que esperaban en la cola de entrada, la mayor parte turistas extranjeros.

Ante medio centenar de compañeros de la plantilla que arroparon la lectura del manifiesto, a los que se unió Toni Morillas, concejala electa y futura portavoz de Con Málaga en el Ayuntamiento, Babot calificó de «mentiras» las declaraciones de la empresa de que dialoga con los trabajadores y anunció una nueva reunión con la institución este viernes 16. «Esperemos que no nos sigan haciendo perder el tiempo y nos encontremos una actitud conciliadora para llegar a soluciones intermedias», afirmó tendiendo la mano.

Previamente, la presidenta del comité de empresa comentó a SUR a las puertas del museo que la huelga ha sido inevitable después de que el pasado lunes hubiera un acercamiento de posturas con el representante de la empresa, el gerente del museo, Guillermo Peiró, durante la reunión de cuatro horas que mantuvieron ambas partes con la mediación del Sistema Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales en Andalucía (Sercla) para evitar la movilización y protesta de trabajadores de este miércoles. Un diálogo que no llegó a firmarse.

«Llegamos a un acuerdo, porque el salario no es lo más importante para nosotros, sino también la conciliación y algunos derechos para el personal de sala que trabaja en festivo. Bajamos nuestra pretensión económica, pero cuando los miembros del Sercla advirtieron que lo que dejáramos por escrito era vinculante, la empresa dijo que no y que sólo se comprometía a negociar a partir del próximo viernes», aseguró Babot, cuando aparecieron por una esquina de calle San Agustín una expedición de uno de los cruceros que ayer atracaron en la ciudad y que llegaron dispuestos a conocer el museo más visitado de Andalucía que acumula en estos 20 años de vida más de nueve millones de visitantes.

El piquete informativo aprovechó para entregar a los integrantes de la cola del MPM una octavilla bilingüe en la que explican que la actual situación de huelga es fruto de «once años sin subida salarial ni IPC, bajada de salarios en la crisis de 2012, dos ERTEs en pandemia y retroceso en las condiciones laborales adquiridas». En este sentido, la presidenta del comité de empresa sostuvo que el Museo Picasso es el que tiene peores condiciones laborales de los principales museos de España y Málaga, y puso como ejemplo el vecino Carmen Thyssen del Ayuntamiento de Málaga, «con el que tenemos una diferencia salarial de entre 4.000 y 10.000 euros menos por categoría y trabajan 100 horas menos al año». Aunque los trabajadores esperan que en la reunión de mañana la empresa cambie de postura y se siente a negociar el convenio, los representantes sindicales consideran que la situación es insostenible por lo que, si no se avanza en el diálogo de unas nuevas condiciones salariales y de flexibilidad horaria, la huelga se mantendrá toda la temporada de verano, fechas de mayor afluencia de público al MPM. El próximo paro está convocado para la semana que viene.