Málaga, nido de espías

La guerra les pilló escribiendo y disfrutando del sol de su casa de Churriana. Era julio del 36 y Gerald Brenan y Gamel Woolsey observaban los bombardeos de la calle Larios y los ajusticiamientos sin control con cercanía, pero con la distancia de su condición de extranjeros. Como ellos, una amplia nómina de residentes y visitantes foráneos vivieron el estallido de la guerra civil o vinieron a la ciudad en aquellos siete meses que Málaga se mantuvo republicana hasta la entrada de las tropas franquistas e italianas, a la que siguió el sangrante episodio de la carretera de Almería. «Muchos de aquellos espías eran escritores que después escribieron sobre Málaga e incluso el propio Brenan los mencionaba a todos en sus diarios», explicó ayer a SUR el escritor Cristóbal Villalobos, que coordina el ciclo que hoy arranca en la Casa Brenan: 'Las agendas secretas. Escritores espías en la época de Gerald Brenan'.

El caso más llamativo y rocambolesco fue el Arthur Koestler, que vino a Málaga con la intención de encontrar pruebas que confirmasen la participación de las tropas alemanas e italianas en el levantamiento de Franco. Aunque Villalobos también cita otros ilustres escritores-espías, como Humphrey Slater que incluso también formó parte después de las Brigadas Internacionales y dejó testimonio de su paso por la ciudad en la novela 'Los herejes'. «En la época de entreguerras fue muy habitual que muchos escritores coquetearan con los servicios de inteligencia y usaran la profesión de periodistas para realizar labores de espionaje», ilustra Villalobos, que también responde a la gran cuestión de si el propio Brenan uso su conocimiento de España para los servicios de inteligencia.

«Sabemos que conocía a agentes que trabajaban para uno y otro bando e incluso dio cobijo a Slater, pero no tenemos ningún dato que lo relacione a él directamente con el espionaje», señala el coordinador del ciclo 'Las agendas secretas', que amplía esas conexiones de Brenan con intelectuales que hacían de agente doble ya que del Grupo Bloomsbury del que el hispanista formó parte también salieron ilustres informadores secretos como Anthony Blunt e incluso inspiraron novelas como 'El tercer hombre' y 'El espía que surgió del frío'.

El programa de 'Las agendas secretas' arranca hoy en la Casa Gerald Brenan con la intervención del escritor y profesor David Jiménez, que enmarcará la época y la relación de una serie de escritores españoles con los servicios de propaganda británicos durante la I Guerra Mundial. La figura del espía húngaro-británico Arthur Koestler protagonizará la jornada de mañana con dos visiones complementarias sobre la llegada del agente y periodista a Málaga donde fue testigo del final de la República, la caída de Málaga y la Desbandá, antes de caer preso de las tropas franquistas. Así, el escritor Jorge Freire, autor de 'Koestler, nuestro hombre en España', retratará la visión de este escurridizo personaje que llegó a entrevistar al general Queipo de Llano para exponerlo ante la opinión pública internacional, mientras que el profesor Andrés Arenas abordará la figura de Sir Peter Chalmers, que dio su protección al espía en su casa de El Limonar, aunque finalmente el húngaro sería detenido y condenado a muerte. En un nuevo giro argumental, Koestler se libraría de aquel destino.

Uno de las intervenciones más esperadas será la del productor José Antonio Hergueta, que vuelve a la dirección con el documental 'Caleta Palace', un proyecto que presentará el viernes en este ciclo. El filme rescatará aquellos meses en los que la ciudad del paraíso fue observada por ciudadanos extranjeros que vivieron en primera persona los bombardeos franquistas y los ajusticiamientos del terror con la connivencia de la República. Un escenario en el que el hotel Caleta Palace que da título a esta producción representaba «la contradicción entre la vida bella del Limonar y ese entorno dulce de Málaga, en el que no obstante pueden pasar cosas tremendas», señaló ayer a SUR el autor y coguionista junto a Regina Álvarez de este documental. Un retrato que se completará con la intervención del especialista en cine Juan Maldonado, que repasará la presencia en el cine de los escritores que se pluriemplearon como espías.