El presidente francés, Emmanuel Macron, hizo este viernes de telonero de la reapertura de Notre Dame el próximo 7 de diciembre. El jefe del Estado galo visitó por séptima y última vez las obras de la majestuosa catedral de París, antes de que abra las ... puertas al público dentro de una semana. Su visita sirvió para ver el estado renovado del templo gótico, en que destaca la luminosidad y la blancura de sus paredes. «Gracias a vosotros, hemos reconstruido Notre Dame en cinco años», declaró Macron ante más de 1.300 trabajadores implicados en la restauración y donantes que contribuyeron a financiarla.
Publicidad
Tras el gigantesco incendio del 15 de abril de 2019, que destruyó la aguja del crucero y la parte de la nave en el transepto, el dirigente de centro-derecha prometió restaurar Notre Dame en cinco años. Muchos de los comentaristas consideraron ese corto plazo como una osadía. Cinco años y siete meses después, las obras aún no han terminado, pero el templo del siglo XIV ofrece un aspecto espléndido. Así lo han mostrado las imágenes de la visita de casi tres horas del presidente. Se paseó por la nave, subió hasta la inmensa estructura del techo —conocida como «el bosque» y restaurada con la madera de robles centenarios— y vio el colorido y luminoso aspecto de las capillas y el deambulatorio.
«Aquellos que descubren de nuevo la catedral la ven con un brillo que nunca habían visto», aseguró Macron, en el acto más numeroso celebrado en el interior del templo desde 2019. «El incendio de Notre Dame representó una herida nacional y habéis sido su remedio con vuestra voluntad y trabajo», dijo a los implicados en la restauración, a los que agradeció haber llevado a cabo «una obra única». «Habéis convertido el carbón en arte», añadió.
Pese a su rápido avance, las obras todavía no concluyeron. Por ejemplo, aún falta sacar un andamio y cubrir con una capa de plomo la aguja del crucero. También queda pendiente la remodelación de la explanada de la iglesia, situada en el corazón de la capital francesa. Esas obras empezarán en el otoño del 2025 y durarán al menos tres años. Las grúas no desaparecerán completamente de la zona de Notre Dame.
Publicidad
A pesar de ello, el presidente predijo que «el impacto de la reapertura será igual de fuerte que el del incendio» y representará «un momento de esperanza». Los partidarios de Macron dirán que con esta visita ha calentado los espíritus de cara a los actos del 7 y 8 de diciembre, cuando habrá una parte más política y otra de religiosa. Los detractores le reprocharán haber disminuido el efecto sorpresa de la reapertura debido a su excesivo apetito de protagonismo. La de este viernes era la séptima vez que el jefe del Estado visitaba las obras. La rápida restauración de la catedral parisina, reconstruida de manera prácticamente idéntica, es el principal legado patrimonial y cultural de su presidencia desde 2017.
No obstante, los actos de la semana que viene contarán con un gran ausente: el papa Francisco. El pontífice no acompañará al estamento eclesiástico galo ni el 7 ni el 8 de diciembre. Una ausencia que ha generado controversia, aún más teniendo en cuenta que Francisco participará el 15 de diciembre en un coloquio en Córcega. Fiel a su reputación de «papa de los pobres», el argentino ha preferido esa isla francesa del Mediterráneo en lugar de la monumentalidad de París.
Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.