María Victoria Atencia, patrimonio de Málaga

La Diputación certificó con un acto en el centro cultural que lleva su nombre la cesión del ingente fondo bibliográfico y documental de la poeta. Una donación de valor «incalculable» en palabras de su presidente, Francisco Salado, que pasa ahora a enriquecer la biblioteca del Centro del 27. Se trata de más de 1.500 volúmenes con primeras ediciones dedicadas de autores como Jorge Guillén, Vicente Aleixandre, Dámaso Alonso, Gerardo Diego, Octavio Paz y Pablo García Baena; y cartas de los nombres más sobresalientes de la literatura contemporánea, de la altura de Luis Cernuda, María Zambrano y Juan Ramón Jiménez. Son, en definitiva, los testimonios literarios y vitales de una vida consagrada a las letras y a la poesía junto a su marido Rafael León. «Nos está regalando sus recuerdos, sus vivencias, momentos inolvidables que nosotros nos encargaremos de mantener siempre vivos», valoraba Salado.

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Primero tuvo lugar la firma solemne, con la rúbrica del presidente de la Diputación, de María Victoria Atencia y de sus hijos Rafael, Victoria y Eugenia y su sobrino Pablo Atencia en representación de Álvaro, que vive fuera de Málaga. Después, llegó el momento de las emociones con un viaje por su trayectoria conducido por Pilar Flores que recordó sus primeros sonetos, se detuvo en su casa junto a La Farola, revivió a sus amigos ilustres, desveló su gusto por lo anglosajón y detalló los hitos de su literatura, esas «palabras precisas y silencios exactos» que decía Alcántara. Un recorrido presidido en todo momento por un retrato de Jesús M. Labrador en el que sin verse su rostro, con ella de espaldas, se la reconoce de inmediato con su característico recogido en el pelo.

Junto a la imagen, una frase, «Ya está todo en sazón», un verso de sus primeros sonetos que con el tiempo se ha convertido en la mejor representación de ella misma. «Ya está todo en sazón. Me siento hecha, / me conozco mujer y clavo al suelo / profunda la raíz, y tiendo en vuelo / la rama, cierta en ti, de su cosecha».

Durante la gala se proyectó el documental 'Solo amor cuenta', en el que se intercalan lo que de ella escribieron y dijeron grandes nombres de la literatura, con el análisis de Francisco Ruiz Noguera, Aurora Luque y los ya desaparecidos Pablo García Baena y Antonio Garrido Moraga. Le siguió un pequeño recital de la Joven Orquesta Provincial de Málaga, como representación de la importancia de la música en su obra. Como muestra, 'Al sur': «Al sur de algún país está mi casa / con discos de Bob Dylan y Purcell, y facturas, / y pudín de Yorkshire, y libros esperándome / y voces que se cruzan por las habitaciones».

Como expresa Ruiz Noguera en el documental, su obra se mueve en una constante «dicotomía entre la realidad inmediata y el afán de vuelo y transcendencia». Toda su poesía pasará ahora a formar parte del Centro Cultural de la Generación del 27, a la que estuvo tan unida, junto con su colección de libros, su correspondencia y otros muchos documentos. Una primera parte de los fondos se depositarán en un espacio específico e identificado en la Sala General de la Biblioteca del Centro del 27, pero la donación al completo ocupará una estancia propia cuando se acometa la ampliación del edificio.