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Una lección de  afición y amor    al toro llevada   al extremo

Una lección de afición y amor al toro llevada al extremo

Entre barreras Los forcados portugueses participarán por primera vez en La Malagueta durante el festejo de hoy con un espectáculo atractivo de fuerte arraigo en el país luso

MANUEL GARCÍA

Domingo, 14 de agosto 2022, 00:30

Aunque han participado en muchos festejos taurinos en España y Francia, las exhibiciones de los forcados aún no son del todo conocidas en nuestro país como en Portugal, donde se originaron y tiene un fuerte arraigo, del mismo modo que en México, donde cada vez mayor predicamento.

Esta tarde el público de La Malagueta podrá disfrutar por primera vez de este espectáculo como aliciente al cartel de rejones que protagonizarán Lea Vicens, Guillermo Hermoso de Mendoza y Martín Ferrer con reses de Benítez Cubero y de Pallarés. Una novedad que Lances de Futuro, la nueva empresa de la plaza, ha querido incluir en esta feria taurina de la mano del Grupo de Forcados Amadores 'Aposento da Chamusca'.

Estos aficionados entran en el ruedo y el primero lleva a cabo el forcado de cara; los otros siete lo ayudan a inmovilizar al toro, siendo uno (el rabillador) quien sujeta el rabo del animal, para provocar su desequilibrio y evitar que, una vez realizada la pega, los compañeros no sean embestidos por el astado.

Pedro Salgueiro: «Nos encanta asistir a Málaga. Es un objetivo muy fuerte para el grupo»

La actuación de los ocho hombres que se juegan la vida de manera altruista eligiendo la maña contra la fuerza en esa pelea cuerpo a cuerpo, es toda una lección de afición y amor al toro al insistir en perpetuar esta forma de entender la tauromaquia llevada al extremo, que además de complementar la lidia, llena el vacío que supone la supresión de la muerte del astado en Portugal.

Para el cabo del grupo de forcados, Pedro Salgueiro, el desafío y vencer la embestida del toro también aglutina el espíritu de «amistad, el gusto por el campo y el toro bravo que se unen en este conjunto de personas con amigos y familia» y que dista de aquellos que antiguamente eran profesionales y cobraban por cada actuación.

Una actividad para la que se preparan cuando no hay corridas. «Entrenamos en fincas de ganaderías con vaquillas, en la que aparecen muchos jóvenes que quieren intentarlo por primera vez, y de ahí sale un grupo lo más fuerte posible para aguantar una temporada y terminarla bien», explicó.

Pese a ese periodo de adiestramiento el grupo es consciente del peligro. «Todos pasamos miedo porque sabemos a lo que nos enfrentamos, pero tenemos que intentar controlarlo y que salga todo bien, como cualquier torero», reconoció Salgueiro. Además, tienen la oportunidad de ver en el sorteo los toros que se van a lidiar para «hacerse una idea de cómo serán las variables y elegir qué forcado va el primero o el segundo, conforme a las características de cada toro y cómo salen al ruedo, que sean más adecuados».

Ilusión

«A nosotros nos encanta asistir a Málaga porque es una plaza de primera categoría, es un objetivo muy fuerte para el grupo y tenemos mucha ilusión para que las cosas salgan bien y que la gente disfrute de nuestra actuación. Es como la gloria», destacó el portugués, además de recalcar que será la primera vez en la historia de la presencia de forcados en La Malagueta.

El grupo de forcados amadores 'Aposento da Chamusca' fue fundado el 29 de julio de 1984 en el pueblo de Chamusca (Ribatejo), y tiene la particularidad de utilizar en las cortesías iniciales y al salir del ruedo en formación, también la capa y el sombrero según el antiguo uso, siendo el único grupo que mantiene esta tradición.

Estos forcados son una evolución de la antigua guardia real portuguesa, ya que en el siglo XVII eran los encargados de hacer guardia, y guardar el acceso al palco real en los cosos. Eran los alabarderos de la Guardia Real de Alfonso VI. Posteriormente, durante el reinado de María II de Portugal, fue decretada en 1836 la prohibición de la muerte de los toros en el ruedo, y para complemento de la lidia de los 'cavaleiros' (rejoneadores), se comenzó a pegar el toro. Por ello, en el siglo XIX se originó formalmente la existencia de los forcados como la conocemos hoy.

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