Desnudos de ideas

Resulta que Max, marca que sustituye en el imaginario de las plataformas audiovisuales a la mítica HBO, luego HBO Max, no ha hallado mejor manera de publicitar su nuevo bautismo, ahora conocido como 'rebranding', que echando toda la carne en el asador. Los primeros días ... de la nueva singladura de este mastodonte venido algo a menos de los repositorios de contenido han tenido como protagonista a 'Naked attraction', así, en inglés chachi también. Presentado por Marta Flich, el formato es un artefacto parecido a un 'First Dates', pero donde se empieza por el postre. O sea, que la originalidad consiste en que los desconocidos que van a buscar pareja se encuentran, de bruces, con una imagen de los bajos físicos de sus pretendientes (piernas y genitales en primerísimo plano), y poco a poco, conforme avanzan los descartes, se llega luego a la zona pectoral y al rostro, poniendo mucho énfasis poético a la voz, ah, como elemento accesorio a la cosificación evidente que el formato subraya desde primera hora, tanto de mujeres como de hombres. En plena época de la opulencia visual, donde casi todo lo mostrable es localizable, la polémica previsible que a algunos han suscitado estos desnudismos enseñados en simplona mecánica, adoptada de un formato británico que recibió parecidas críticas en Reino Unido y en EE.UU., resulta más antigua que el hilo negro. Alguna asociación ultracatólica ha puesto el grito en el cielo, qué sorpresa, por el supuesto escándalo que el programita, lo más visto de la nueva Max, puede ocasionar al estar accesible para menores si en sus casas no han activado el filtro por edades. Pero me huele que tanto el muy aburrido espacio, sucesión de órganos y lorzas más o menos naturales, como cualquier efecto colateral en forma de eco negativo, desnuda más que nada la falta de ideas y de originalidad para la producción propia o para la promoción de calidad de esta nueva etapa española de la extinta HBO. Porque al final lo más escandaloso que insinúa el formato, ay, es que los cuerpos velludos y no tatuados están casi demodé.