Juan Diego Botto: «Tenemos derechos que eran impensables en los años de Lorca»

Es necesario echar la vista atrás si se quiere entender el presente. Imprescindible comprender la historia para asimilar el mundo actual y el futuro que está por venir. Juan Diego Botto se considera fiel seguidor de la vida y obra de Federico García Lorca: «Siempre he sentido fascinación por él, creo que es posiblemente el mejor dramaturgo y poeta que tuvimos en el siglo XX en España. Fui leyendo de su vida y hay ecos que resuenan muy actuales», explica así el escritor cómo comenzó hace tres años a trabajar en esta nueva obra de teatro. 'Una noche sin luna' en principio iba a ser un recital de Lorca pero, finalmente, acabó siendo una pieza original con un monólogo de Botto, todo con los consejos de su mano derecha, Sergio Peris-Mencheta. «No tuve dudas de que él era la persona que tenía que dirigir la obra. Además fue Sergio el que me dijo que la pieza iba a funcionar mejor como un monólogo. Al final llevaba él la razón», confiesa entre risas Botto.

Es inevitable hablar de la vida de Federico García Lorca y hacerlo sin drama. A pesar de ello, el actor asegura que en las casi dos horas que dura la obra, el humor está mucho más presente. «Si lo contáramos porcentualmente, gana el humor. Eso es lo que nos permite entrar en ciertos temas con más facilidad y hace que el espectador esté receptivo cuando llega la parte más dramática», aclara el actor.

«Hay un mensaje encriptado en su historia que tenía mucho sentido ser desencriptado hoy día», asegura Juan Diego Botto. 'Una noche sin luna' conmueve y sorprende al espectador por su forma de acercar la vida del dramaturgo al propio siglo XXI, un viaje en el que las vivencias y las obras de Lorca sirven como un espejo donde mirarse para asimilar la actualidad en la que la sociedad está inmersa. «Tenemos derechos adquiridos y conquistados que antes eran impensables en los años que vivía Lorca, hemos avanzado muchísimo», añade el escritor de la obra.

Uno de esos mensajes encriptados de la historia del poeta es el de la homosexualidad: «Claramente su identidad sexual fue muy importante, ya que era un momento en el que no podía mostrarla abiertamente. Es un hecho que recorre toda su vida y que encuentra paralelismos con la actualidad. Todavía encontramos noticias en las que vemos que se les apuñalan o les dan palizas por ser homosexuales», reflexiona el actor. Otro de los puntos que más maravillaron a Juan Diego Botto al escribir esta pieza fue la mirada que tenía Lorca hacia los colectivos más vulnerables de la época. «Siempre tenía puesta la atención en los más frágiles. Sus mejores teatros estaban protagonizados por mujeres, él ya dejaba un espacio a las mujeres para expresarse y desarrollarse», puntualiza el escritor.

Desde noviembre, Botto está actuando por teatros de toda España acercando un poco más la vida y obra de Federico García Lorca a los espectadores. Y con el punto especial de ser una obra escrita por él y en la que se planta en el escenario a contarla desde la perspectiva de su mirada, algo que le hace sumamente feliz. «Aunque suene paradójico, a pesar de que las artes escénicas viven unos tiempos duros, este año para mí va a ser bueno; voy a estar representando en los escenarios un texto que disfruto muchísimo, algo que me apetece mucho contar», concluye Juan Diego Botto.