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El CAC cumplió este viernes 20 años. Dos décadas en las que más de seis millones y medio de visitantes han atravesado sus puertas. «Y ... conviene recordar cosas que la gente olvida», empezó diciendo Fernando Francés en la inauguración de la exposición de Friedrich Kunath que da el pistoletazo de salida al XX aniversario. El que fuera director del CAC durante 16 años y que ahora comisaria la mayoría de sus exposiciones hizo una contundente defensa del modelo de gestión del CAC y de su papel crucial en la transformación cultural de la ciudad. Un alegato que Francés pronunció delante de la concejala de Cultura, Noelia Losada, quien hace apenas un mes anunció la intención del Ayuntamiento de municipalizar la gestión del centro.
«Cuando llegó el CAC no había ningún museo abierto en la ciudad de Málaga», señaló Francés. En su opinión, el museo no solo ha «reformado» un barrio en el que era «peligrosísimo entrar después de las siete de la tarde en invierno» y con más de 300 locales cerrados en 2004, sino que ha contribuido a «cambiar la imagen de la ciudad». «Los grandes artistas del mundo han tenido una exposición individual en Málaga en el CAC», algo que, según dijo, no ha sucedido en ningún otro museo «de París para abajo».
Francés dejó mensajes para todos. Valoró que el CAC haya logrado afianzar su marca en el arte «con tres millones de euros al año, cuando otros museos de este mismo lugar, proviniendo las piezas del mismo sitio, duplican el presupuesto». Una referencia al Pompidou que no se quedó ahí: «El CAC es un museo municipal y malagueño, no es una franquicia al uso, no es museo de colección ajena, es de colección propia. Las obras de esta colección son propiedad del Ayuntamiento de Málaga», argumentó. Defendió, además, el alto «nivel de control» del Consistorio sobre el CAC y agradeció el trabajo «exigente y profesional» de los funcionarios del Área de Cultura, en una clara alusión a la oposición política que ha denunciado en más de una ocasión la falta de transparencia en la gestión del centro cultural.
El discurso llega cuando el CAC se enfrenta este año a un más que probable cambio de ciclo. El Ayuntamiento ha iniciado el camino para tomar la gestión del centro de arte contemporáneo. Los nuevos pliegos en los que ya trabaja el Área de Cultura contemplan asumir el control y externalizar únicamente el programa de exposiciones, un modelo muy similar al que ya funciona en el MUPAM. El objetivo es publicar el documento antes de primavera con el objetivo de no tener que aplicar la prórroga de un año a la actual empresa concesionaria, Gestión Cultural y Comunicación, que finaliza su contrato en septiembre.
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