Fallece Enrique Castaños Alés, teórico, impulsor y figura clave del arte en Málaga

No se puede hablar del arte contemporáneo en Málaga sin citar a Enrique Castaños Alés (Málaga, 1956). Lo suyo no eran los pinceles, sino las palabras que modelaba, acariciaba o retorcía como un artista. La mutación del ambiente cultural de la capital en la segunda mitad del siglo XX no solo tuvo a autores revolucionarios e imprescindibles, sino también analistas, pensadores y teóricos como el profesor Castaños Alés, que fue una de las máximas autoridades. Impulsor de esa renovación artística y de las tendencias que bullían en Málaga, el escritor y crítico ha fallecido en su ciudad natal, donde el este lunes se celebró su funeral.

Hombre discreto, sencillo y de trato exquisito, los caminos de este observador del arte contemporáneo y de SUR se cruzaron en 1996, cuando comenzó su amplia andadura como crítico de arte del periódico durante más de década y media. Puntual en sus artículos, acertado en los análisis y atractivo en los titulares, alimentó debates -nunca rehuyó la crítica cuando el nivel o la metodología no se correspondían con los objetivos de las exposiciones- y dejó además una obra fundamental para entender la transformación artística y cultural de la capital: 'La pintura de vanguardia en Málaga durante la segunda mitad del siglo veinte' (1997), que fue revisado y ampliado en 2011 con el título 'Las artes plásticas en Málaga en la segunda mitad del siglo XX'.

Una biblia indispensable en la que puntualizaba las fronteras de la Generación del 50 (Jorge Lindell, Stefan, Brinkmann, Peinado, Barbadillo, Chicano, Ruano, Hernández, Alberca, Bornoy, Pepa Caballero…), repasaba la neofiguración de los setenta y primera mitad de los ochenta (Carlos Durán, Gabriel Padilla, Seguiri, Bola Barrionuevo…), analizaba la consolidación de las libertades que trajo la democracia (Agustín Parejo School, Rogelio López Cuenca, Diego Santos, Jorge Dragón, Alvarado, Paco Aguilar, Sebastián Navas, Chema Lumbreras, Isabel Garnelo, José Mª Córdoba, Titi Pedroche, Margaret Harris…) y cerraba con la generación reflexiva de los noventa (Ivars, Jesús Marín, Óscar Pérez, Pablo Alonso Herraiz, Fernando de la Rosa…).

No hubo movimiento ni expresión artística que no analizara este experto, que además visitó, digirió y escribió de todos los grandes montajes que comenzaron a llegar a Málaga hasta convertirla en una ciudad cultural y de los museos: Picasso, Giacometti, Aalto, Le Corbusier, Álvaro Siza, Luis Barragán, Joaquín Torres-García, Tàpies, Chillida, Berrocal, Francis Bacon, María Blanchard, Joaquín Peinado, los hermanos Chapman, Gerhard Richter, Alex Katz, Tony Cragg, Neo Rauch, Daniel Richter o Plensa, entre otros.

Una actividad incansable como crítico de arte que fue paralela a su amplia y reconocida trayectoria académica como profesor de Instituto y profesor asociado del Departamento de Historia del Arte de la Universidad de Málaga. Licenciado en Filosofía y Letras en 1979, se especializó en Historia Medieval, aunque su particular mirada brilló especialmente cuando se reflejó en el espejo del arte contemporáneo. De la creación de aquí y de ahora. Así, su tesis doctoral se centró en 'Los orígenes del arte cibernético en España. La experiencia del Centro de Cálculo de la Universidad de Madrid'.

Además de SUR, Castaños Alés también fue colaborador de las revistas 'Lápiz', 'Galería', 'Cuadernos Hispanoamericanos', 'Boletín de Arte de la Universidad de Málaga', 'Arte y Parte' y 'Fedro. Revista de Estética y Teoría de las Artes', entre otras. Además, también puso en práctica sus teorías y conocimientos como director de la sala de exposiciones de la Diputación de Málaga, coordinador de la sala de exposiciones de la Universidad de Málaga y director del Departamento de Promoción Cultural de la Fundación Picasso-Casa Natal.

Además fue comisario de múltiples exposiciones, entre las que destacan las antológicas, retrospectivas y monografías dedicadas a Barbadillo, Stefan von Reiswitz, Godofredo Ortega Muñoz, Esteban Vicente, Francisco Hernández, Dámaso Ruano, Manuel Mingorance Acién o el Colectivo Palmo de Málaga. En 1992 fue comisario de la exposición 'El arte de construir el arte', con los fondos del Colegio de Arquitectos de Málaga. Una incansable actividad de un crítico, profesor y comisario, a cuyo legado es inevitable acercarse para conocer los movimientos artísticos de Málaga de finales del siglo XX y comienzos del XXI.