La España crápula de Solana, Cossío y Bores se apodera del Museo Carmen Thyssen

Y relación tiene esta última exposición sobre el nuevo realismo del arte español con el montaje titulado 'Negra es la noche', ya que su propuesta, además de mostrar el tenebrismo, enfrenta precisamente esa convivencia artística en nuestro país de lo tradicional con las vanguardias en las primeras décadas del siglo XX. Y es que Solana ejerce de figura central en esta muestra de pequeño formato -una treintena de grabados- ante los discípulos Cossío y Bores, que exploran ese mundo siniestro y nocturno de la España de los años 20, pero se separan del academicismo del maestro para dejarse contaminar con las nuevas tendencias europeas, como el ultraísmo o el expresionismo.

De esta forma, una obra de Gutiérrez Solana antecede a cada bloque temático -la noche, los burdeles, el carnaval, la calle o los toros, entre otros-, para después conocer la visión de los otros dos artistas. Desde un punto de vista gráfico, la contuidad argumental se puede observar en obras como las 'Mujeres de la vida' que ejercen la prostitución y que retrata Gutiérrez Solana con ragos realistas que pierden definición en la que parece la versión masculina de la anterior, 'Frontispicio', bajo la firma de Francisco Bores, o se estiliza aún más en el retrato de 'Cora y Enriqueta', de Francisco de Cossío.

«'Negra es la noche' une la visión de tres maestros de la pintura española con el hilo conductor de esa visión oscura y sombría de España», ha explicado este viernes en la presentación de la exposición la directora del Museo Carmen Thyssen', Lourdes Moreno', que ha destacado la colaboración con la Universidad de Cantabria, cuya Colección Museográfica -formada por más de 5.000 estampas- ha prestado este conjunto de obras tenebrosas.

Esa modernidad de los 'franciscos' frente al trazo academicista de Solana también se observa en las propias técnicas de las estampas, ya que mientras el segundo apuesta por el aguafuerte, los otros dos autores experimentan con la xilografía, que utilizaba la plancha de madera frente al aluminio, como ha señalado Nuria García, directora del Área de Exposiciones de la Universidad de Cantabría. La presentación también ha contado con la concejala de Cultura, Noelia Losada, que ha subrayado que este montaje se suma a la «abrumadora» oferta cultural de la ciudad de Málaga en este verano de 2022.

La revisión del costumbrismo patrio llevado a la sordidez tuvo en Gutiérrez Solana al gran autor español de comienzos del siglo XX y su obra cargada de crítica social y de los vicios de aquella España se hunde en la gran herencia de nuestro arte desde las pinturas negras de Goya. No en vano, el propio Machado lo retrató como un «autor inquietante» y un «Goya necrómano» ya que, como ha señalado Lourdes Moreno, Solana no evolucionó en sus cuadros y grabados sino que siempre se mantuvo fiel a este mundo crápula y canalla de los bajos fondos y de ese ambiente que hoy se denomina exclusión social. Una visión que no fue una pose o una motivación pictórica, sino casi una militancia, ya que este autor negro, negrísimo no solo pintaba lo que vivía, sino que vivía como pintaba.

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La enigmática obra 'Málaga' que Cossío dedicó a la ciudad

Se ve a una bailarina con lo que parece un sombrero de copa que levanta la pierna y la falda en el centro de la pista. Es un local oscuro, aparentemente elegante, donde un tipo no pierde detalle del movimiento de la chica. Su título 'Málaga' (1923). Una obra que ha despertado la curiosidad en la inauguración de la exposición 'Negra es la noche' del Museo Carmen Thyssen, pero del que se desconoce si su autor, el cántabro de origen cubano Pancho de Cossío, realizó en la ciudad o simplemente la denominó así como un recuerdo o un homenaje.

Lo que parece indudable es que la estampa alude a la capital malagueña, ya que forma parte de una colección de la que también se exhiben en el Carmen Thyssen otra escena de garito nocturno titulada 'Bilbao'. Ambas xilografías forman parte de las ocho supervivientes de la colección que el artista realizó en los años veinte para 'Hampa. Estampas de la mala vida', un libro de poemas canallas del periodista y escritor José del Río Sáinz.