Es el monumento más simbólico de Benalmádena. Realizada en bronce, con la firma del escultor Jaime Pimentel, reproduce una joven desnuda, peinada con flequillo y coleta, y con una actitud oferente sosteniendo una concha en la mano con agua. Y pese a que mide apenas 1,25 metros desde que se instaló a finales de los 60 se convirtió en un icono como símbolo de la apertura de la ciudad y hospitalidad hacia sus visitantes. No obstante, la estatua ha desaparecido temporalmente de la emblemática plaza de España, aunque hay una razón de película: el rodaje de la nueva comedia del fuengiroleño Álvaro Díaz Lorenzo, 'Vírgenes', que rescata la Costa del Sol del 'boom' turístico.
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Precisamente, el 'raccord' y la ambientación es lo que ha obligado a ocultar a la famosa Niña de bronce, ya que la trama de la película se localiza en su mayor parte en Torremolinos, por lo que la popular plaza encalada y con sabor tradicional 'interpreta' un escenario de la vecina población en aquella época. Para ello, el equipo de arte de 'Vírgenes' ha colocado unas plantas donde se encontraba el monumento que ha quedado completamente oculto. Y junto a la fuente, un guardia urbano retro ha terminado de ambientar las escenas a rodar en este rincón.
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Los actores César Vicente ('Dolor y Gloria'), Xavi Caudevilla ('Los Protegidos: A.D.N') y el malagueño Carlos Scholz (que ya rodó aquí las series 'Toy Boy' y 'Urban') son los protagonistas de 'Vírgenes', que narra la historia de tres chicos de Sevilla que viajan a la Costa del Sol de los 60 y quedan deslumbrados por una España luminosa y libre, muy diferente de la que proceden. La llegada de los tres personajes en un 600 a ese Torremolinos cosmopolita y abierto es una de las escenas que se rodaron en la jornada de ayer en la plaza de España de Benalmádena, que por unos días ha perdido a su famosa Niña por exigencias del guion.
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Y aunque el cine es el que ha obligado a disimular el bronce de la joven esculpido por Jaime Pimentel -autor de otros iconos muy malagueños, como el Cenachero o el Biznaguero de la capital-, paradójicamente fueron también las películas las que contribuyeron a convertir la escultura en una imagen de la localidad ya que, poco después de ser instalada en 1968, la Semana de Cine de Autor de Benalmádena internacionalizó al año siguiente el monumento al reproducirlo en escala y entregarlo como trofeo a los ganadores de su palmarés. Tras el rodaje en la jornada de ayer, el equipo de la película 'Vírgenes' restituyó el popular emblema en su estado habitual.
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