La película que cuenta lo que no se ve del Festival de Málaga

Frente al silencio de la grabación, cada vez que se escuchaba la palabra «corten» parecía como una orden para hablar. Así que aprovechamos para acercarnos al protagonista a preguntarle por esta dramedia en la que encarna a un guionista que ha quedado en Málaga para verse con su amante, una actriz a la que encarna Bruna Cusí ('Verano 1993'). «Es una historia fresca, divertida y amena sobre una pareja que ha quedado en el festival para pasárselo bien, para darse una tregua en su rutina y sus vidas, como apunta el título», explica Salva Reina que asegura que para este papel se ha fijado en el propio director Mario Hernández. «Aunque el diga que no, yo creo que tiene que ver con sus experiencias, al menos, en lo relativo al cine», apunta el actor malagueño.

Con este argumento del reencuentro de unos amantes que mantienen una relación intermitente, la pregunta es inevitable. «Que si se liga en los rodajes: Yo no», contesta con una carcajada Reina que aparta rápido la pregunta y apostilla: «Tampoco ligo mucho en la vida real. Nunca se me ha dado bien». Esto lo dice vestido con un elegante traje azul y solvente camisa negra, maquillado y con una melenita caída hacía delante que le da un toque a su personaje del guionista Eduardo. Con esa planta, la verdad es que cualquiera diría lo contrario. Así que concede que en el mundillo del cine surge el amor, aunque también lo contrario. «Hombre, pasamos muchas horas juntos lo que favorece el roce, aunque en los rodajes también he visto saltar chispas como en ninguna otra parte, pero lo que me gusta del cine es que es como el rugby, lo que pasa en el campo se queda en el campo y se arregla con la cerveza de después del rodaje», asegura el intérprete que todavía tiene lejos ese momento de la birra ya que lo llaman para una nueva escena.

Ahora toca el final de la escena de la rueda de prensa en la que el personaje de Reina está un poco desconectado. En la escena también participan el periodista Domi del Postigo, que se da vida a sí mismo en el papel de presentador y relaciones públicas que durante años hizo para el Festival de Málaga, y otro par de guionistas, a los que dan vida Sara G. Romero y el propio director del filme, Mario Hernández, vestido con una chaqueta de cuero. «Un guionista que conozco y me cae fatal siempre va con un chupa así que me la he puesto», confiesa el cineasta, que se calla el nombre de ese personaje real al que 'homenajea' en este cameo a lo Hitchcock. En la ficción, los guionistas se quedan fuera de juego cuando les preguntan por qué se dedican al cine en lugar de haber sido panaderos. Así que nos guardamos la pregunta para Reina en el siguiente receso.

«Ja, ja, pues te iba a decir que para no despertarme al alba, pero llevamos dos semanas de rodaje a las 8 de la mañana», asegura el actor que la semana que viene cambia los madrugones por las madrugadas ya que tocan escenas de fiesta en la terraza del hotel hasta las tantas. Cada vez que termina una toma, el protagonista sale despedido en busca de un café -ha perdido la cuenta de los que lleva hoy-, consultar el móvil o charlar con el equipo. Nunca pasa por el combo, donde está el director y el resto de actores se arremolina para ver cómo ha quedado la secuencia. «No me gusta verme porque siempre me veo horroroso. La verdad es que no sé cómo me pagan», reconoce el actor que también podría responderse porque es corresponsable de las nóminas como coproductor de la cinta con su compañía La Cochera.

Cuatro años ha tardado en poner este rodaje en marcha, el segundo que promueve tras 'Isósceles', de Ignacio Nacho. El actor ha sacado adelante 'Tregua(s)', junto a la productora Sierra Gador, con la colaboración de Canal Sur. Sin ayudas públicas. «No, con esto no se hace uno rico. Para eso había puesto un Mercadona», bromea Reina, al que Domi del Postigo le da la réplica: «¡Pues mira que tenías el local... y vas y pones La Cochera Cabaret». El periodista ha sido nombrado esta misma semana presidente del Consejo Audiovisual de Andalucía, pero se había comprometido a esta pequeña intervención hace meses y ha querido cumplir su palabra. «Con esto pongo fin a una etapa», asegura el ocasional actor que, a partir de ahora, se quedará detrás de las cámaras.

Casualidades de la vida, el salón en el que se rueda la escena ambientada en el Festival de Málaga es la misma en la que Del Postigo presentó la entrega del Premio RTVA del certamen hace dos años y en la que el galardonado fue el mismísimo Salva Reina. Curioso cierre de un círculo que incluso podría trazar alguna vuelta más si cumplen fechas, 'Tregua(s)' se termina para la próxima edición y el certamen selecciona esta mezcla de comedia y drama. «Nada nos gustaría más que estrenar aquí», reconoce Reina antes de volver a la rueda de prensa. La de ficción. Vuelven a gritar silencio, así que, sin hacer ruido, nos vamos con las preguntas a otra parte.