La película ambientada en los 70, rodada en los 80 y estrenada con 40 años de retraso llega al Albéniz

«Lo más increíble es que si vas a ver la película piensas que se acaba de rodar, porque las imágenes se han digitalizado y restaurado fotograma a fotograma y se ha vuelto a sonorizar rescatando todo el material de descarte», explica el malagueño Carlos Taillefer, director de producción de aquel proyecto. «Todavía nos llamábamos entonces 'jefe de producción'», apunta para subrayar el tiempo que ha pasado desde este rodaje independiente en el que atravesaron el desierto argelino desde la orilla norte de Orán hasta cerca de la frontera con Mali, la ruta que por entonces hacían los bólidos del París-Dakar. Este viernes acompañará a Antonio R. Cabal en la presentación del filme en Málaga, cuatro décadas después de que su película prima hermana se estrenará en la ciudad en la cartelera del América Multicines con la frase promocional: «Solo podían arriesgar la vida… y lo hicieron».

Peligros naturales, trampas y piratas de las arenas salpican esta película de aventuras que protagonizaron unos jovencísimos Maru Valdivieso ('Los amantes del Círculo Polar') y Enrique Simón ('Brigada Central' y 'Los ladrones van a la oficina'), acompañados de Antonio Junco en la que fue su única película. «Nosotros también pasamos nuestros peligros en algún momento de aquellos 14.000 kilómetros que recorrimos rodando, éramos unos jovencitos echaos 'palante' porque ninguno tenía más de 30 años», cuenta Taillefer, que recuerda las condiciones extremas que soportaron los 21 integrantes del reducido equipo de esta 'road movie' -5 actores y 17 técnicos- con noches con temperaturas bajo cero y días con más de 30 grados.

«Fue un reto para todos porque además no había especialistas ni dobles, todo lo hicimos a pelo», cuenta el malagueño que tampoco olvida que durmieron «más noches en la arena que camas porque allí no existían ciudades, sino campamentos o poblados». «Había días que no nos tropezábamos con nadie en aquel mar infinito de arena», exclama Carlos Taillefer, que también recuerda los problemas de salud del equipo. «Lo más parecido a un médico que encontramos fue un estudiante de quinto curso que se embarcó con nosotros en el rodaje», cuenta divertido. Como ya ha contado, eran jóvenes y algo inconscientes, como los protagonistas de la propia película.

En la caravana de siete coches que formaba la infantería de la película se incluía el Land Rover que conducían los protagonistas y otro de reserva por si se estropeaba, además de un camión con cámara frigorífica para conservar el negativo y que no se velara con las altas temperaturas. «Otra cosa alucinante son los nombres de los que participaron en esa película, entonces unos niños y hoy grandes del cine y el teatro», cuenta Taillefer que comienza su lista con Maru Valdivieso, premio Max; el ayudante de dirección Paco Periñán, más tarde realizador de 'Contra el viento'; el director de fotografía Javier Salmones, que entonces hizo su primera película y este año ha filmado 'La infiltrada'; la 'script' Eva Lesmes, guionista y directora de series como 'El comisario', y la maquilladora debutante Ana López Puigcerver, nominada a los últimos Oscar por 'La sociedad de la nieve'.

Jóvenes de entonces que pusieron su entusiasmo en esta película de Antonio R. Cabal que siguió ligado al cine en facetas de proveedor, pero nunca volvió a dirigir. Hasta que el pasado año rescató aquella película para reinventarla y adaptarla a los tiempos, a la vez que servir de testimonio de un cine de guerrillas capaz de conquistar la cartelera. «Hoy sería una película 'low cost', pero Antonio se portó de forma excepcional con todo el equipo», concluye Carlos Taillefer que, cuando ve las fotos de rodaje, no puede evitar sonreír: «Tenía pelo y 25 kilos menos».