George Van Mellaert: «Siempre me decían que mi historia era de película, y ahora se hace realidad»

Ni sentado a la sombra prescinde de su sombrero. Es parte ya de su personalidad, su marca. Lo acompaña de una chaqueta blanca sobre una camisa negra, lo que revela su gusto por los contrastes, los claroscuros. Y mucho de eso habrá en la historia que está a punto de convertir en una ficción internacional. George Van Mellaert disfruta relajado de las «increíbles vistas» que hay desde el Gran Hotel Miramar de Málaga mientras concede esta entrevista, pero esa sensación de «libertad» la perdió durante muchos años. Como abogado se vio envuelto en una compleja trama de espionaje y corrupción que con el tiempo se atrevió a contar en la novela 'Corruption of Justice'.

El bestseller de Amazon pronto dará el salto a la pantalla con una producción de Hollywood, con la firma de Wanda-Halcyon Television, que se rodará en Málaga y Almería con actores de fama mundial entre finales de agosto y principios de septiembre. «Muchas personas de mi entorno me decían que mi historia era de película. Y ahora esta ficción se ha hecho realidad, o la realidad se hace ficción», declara.

Y todo en plena pandemia, con estrictas medidas de seguridad para todo el equipo y traslados internacionales sujetos a los vaivenes del virus. «Es una aventura dentro de otra aventura», dice en la única concesión al español que hace en esta charla el abogado, escritor y también músico suizo.

En la ficción, 'Corruption of Justice' sigue a un letrado joven y talentoso en la sede de la UE en Bruselas que representa a una rica corporación de diamantes. En realidad, esa empresa es una tapadera para una agencia de inteligencia extranjera y él, sin saberlo, se encontrará atrapado en medio de una guerra entre naciones involucradas en actividades clandestinas. Lo que hay de cierto y de fantasía en el argumento, George Van Mellaert lo deja a la elección del espectador. «La realidad siempre supera a la ficción, por lo que ¿por qué iba a decirles si es una historia real o no? No me iban a creer en cualquier caso», asegura.

La serie juega con esa fina línea entre lo auténtico y lo inventado para captar el interés del espectador. Pero en la base, insiste George Van Mellaert, hay hechos reales de los que él fue testigo. «Y si cuando estás viendo un thriller de espionaje, estás sentado al borde de la silla porque te da miedo lo que va a pasar, en la vida real es igual, también te da miedo qué es lo próximo», confiesa.

Salió de aquello y se lanzó a contarlo cuando se sintió preparado, sin temor a las consecuencias. «Creo que cuando eres totalmente sincero contigo mismo, estás haciendo lo correcto», sentencia. El productor Pat Andrew captó enseguida el potencial de una historia que mezcla «espionaje, intriga y hechos reales», y apostó por llevarla a la pantalla a lo grande. Dicen que cada capítulo rondará los cinco millones de euros.

Sabe que una serie de estas características tendrá una gran repercusión internacional. Y está preparado. «Cuando produces algo interesante, quieres compartirlo con la gente. Escribí el libro con estos conceptos tan complejos de justicia, ley, intriga y espionaje porque quería decírselo al mundo entero», afirma.

No solo aporta la historia. Él pondrá también música a la serie –algo en lo que cuenta que ha estado trabajando durante el confinamiento– y tendrá un rol sobre el que aún guarda silencio. Tampoco desvela el nombre de esos actores de «alto nivel» que darán vida a la trama, ni las localizaciones malagueñas. «Seguid de cerca nuestras redes sociales», se limita a decir. Mientras tanto, él seguirá descubriendo una ciudad que cada vez tiene menos misterios para él. Málaga le ha ganado, dice, «por su belleza, el clima y la cultura».