Chete Lera, el secundario que trabajó con los grandes del cine español

Su hermano, el músico Joaquín Lera, confirmaba la trágica e inesperada muerte del actor de 'Abre los ojos' y 'Smoking Room'. « Estaba feliz, viviendo en un pueblito de Málaga con su querida Charo. Venía de darse un baño en el mar y el asfalto se ha llevado a uno de los más grandes actores que ha dado este país. Te quiero», ha sido la despedida de Joaquín, que se refiere al mayor de sus once hermanos como "Chetiño", como lo llamaba cariñosamente. Según el servicio de emergencias de la Junta de Andalucía, un testigo dio aviso del accidente, aunque cuando llegaron los servicios médicos solo pudieron confirmar el fallecimiento del intérprete, que era el único ocupante del vehículo. Su cuerpo fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Málaga, donde mañana se le practicará la autopsia.

Ramón Mariano Fernández Lera (A Estrada, Pontevedra, 1948-Rincón de la Victoria, 2022) comenzó 'en serio' en el teatro en los 80, el medio que fue su auténtica escuela y que nunca abandonaría con títulos como 'La vida es sueño', 'Largo viaje hacia la noche', 'Cara de plata' o el popular montaje 'Subprime'. El actor también pasó por las tablas del Cervantes, donde abrió la edición de 2002 del Festival de Teatro de Málaga con 'Cómo aprendí a conducir', junto a Amparo Larrañaga. Y aunque la gran pantalla fue la que lo convirtió en actor de referencia, confesaba que lo suyo eran los escenarios, donde también trabajó con los directores José Luis Gómez, Lluís Homar o Gerardo Vera.

Su debut en el cine lo cambiaría todo y entre finales de los 90 y la primera década del siglo XXI protagonizó decenas de películas. Comenzó a las órdenes de Enrique Urbizu en 'Todo por la pasta' (1991), tras la que llegaría 'La ardilla roja' (1993), de Julio Médem, aunque su consagración definitiva se produjo cuando Fernando León de Aranoa le ofreció el papel de líder de una singular compañía de teatro que tiene que hacer de tripas corazón para interpretar para un único espectador el papel de una 'Familia' (1996). Su pelo cano, inconfundible barba y el inseparable cigarro daba para encarnar todo tipo de secundarios y en los siguientes años encadenó un personaje tras otro en 'Abre los ojos' (1997), de Alejandro Amenábar; 'Barrio' (1998), de nuevo con León de Aranoa, 'Flores de otro mundo' (1999), de Icíar Bollaín; 'Plenilunio' (1999), de Imanol Uribe; 'El alquimista impaciente' (2002), de Patricia Ferreira; 'El misterio Galíndez' (2003), de Gerardo Herrero; 'Concursante' (2007), de Rodrigo Cortés, y 'Todo es silencio' (2012), de Jose Luis Cuerda.

El mismo año que estrenaba obra y gira en el Teatro Cervantes, 2002, Chete Lera también protagonizaba el Festiva de Málaga Cine Español con el concurso de dos películas: la comedia de Miguel Álvarez 'Mi casa es tu casa' y el drama laboral 'Smoking room', de Roger Gual y Julio Wallovits. Con esta última dejaría huella ya que fue premiado como integrante del reparto de la película, junto a sus compañeros Juan Diego, Antonio Dechent, Ulises Dumont y Francesc Garrido. El actor, afincado en Madrid durante décadas, adquirió una casa en el municipio de Macharaviaya, donde pasaba temporadas "escondido" -según confesó- hasta que, tras reducir su actividad en cine y teatro, fijó su residencia en este "lugar idílico cerca del mar".