Aitana Sánchez Gijón y su desmayo en Málaga

La actriz Aitana Sánchez Gijón se confesó ayer en La Termica en el nuevo ciclo Autorretrato que coordina Ayanta Barilli. Contó, por ejemplo, que «lo más extremo» que le ha pasado haciendo teatro fue una vez que se desmayó en Málaga interpretando Medea, que una vez con Mario Vargas Llosa en Mérida tuvieron que parar la función porque el público no les dejaba concentrarse y que aunque la función dure tres horas vive la profesión «como si durase 24 horas, se convierte en el epicentro de mi vida». Además, contó que continuará unida a las tragedias griegas con Las troyanas y defendió la lectura: «Si no, estamos limitados».