El concepto de multiplicidad, una idea que va más allá de la diversidad y que reclama una producción cultural que supere lo tradicional y turístico, es lo que ha puesto hoy sobre la mesa la Invisible en la inauguración del Congreso Internacional sobre el Futuro ... de las Políticas Culturales-Multiplicity, que se celebra en el patio de la Casa hasta el domingo. «En Europa ya se ha debatido sobre la necesidad de la cultura múltiple por lo que el objetivo de este congreso es traer a toda esa gente para invitar al Ayuntamiento a que se siente con nosotros y construyamos un modelo cultural más heterogéneo», ha explicado a SUR el arquitecto y organizador del encuentro, Kike España.
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Desde que expiró el plazo hace dos semanas para la salida voluntaria del edificio de calle Nosquera, la Casa Invisible ha confirmado que no han recibido desde entonces comunicación alguna del Consistorio, por lo que ha reiterado que «seguimos lanzando el guante para dialogar con el Ayuntamiento». En este sentido, España ha señalado que la política cultural municipal es «muy homegénea», por lo que desde el colectivo abogan por ampliar las iniciativas bajo la idea de la multiplicidad.
«No queremos decir que que no haya museos franquicia, grandes eventos o actividades más tradicionales, sino que en una ciudad democrática y libre como Málaga se complemente con otras formas de entender la cultura que se basa en la experimentación, procesos más lentos y atención a gente local asentada en el territorio», ha sostenido Kike España, que ha asegurado en la inauguración del congreso que la Invisible «está en riesgo de desalojo porque está en una situación crítica, pero el Ayuntamiento de Málaga sigue sin volver al dialogo».
Con el objetivo de promover ese encuentro con las autoridades, la Casa Invisible ha convocado en su sede del centro de Málaga a especialistas europeos y latinoamericanos en el Congreso Multiplicity que ha comenzado este viernes debatiendo sobre las políticas culturales con la artista y cineasta alemana Hito Steyerl, los miembros del colectivo indonesio Ruangrupa, el director artístico boliviano Max Jorge Hinderer Cruz y Monika Mokre, presidenta del European Institute for Progressive Cultural Policies de Viena, que coorganiza el congreso junto al Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía.
Así, Hinderer Cruz ha expuesto los cambios políticos en su país en las dos últimas décadas para concluir que la reforma constitucional en Bolivia consagra al Ministerio de Cultura como garante del «derecho a la diferencia, a la igualdad a través de la diferencia». Por su parte, Mónica Mokre también ha expuesto los cambios en Austria con la integración en Europa, que ha supuesto un nuevo paradigma en la cultura al contemplarse la rentabilidad de las iniciativas que se emprenden. «Generar ingresos y contar los visitantes no es negativo», ha sostenido, pero ha advertido que al convertir el criterio del rendimiento económico en el indispensable se han «creado más problemas que soluciones» provocando un «empobrecimiento del sector» al quedar anuladas las «pequeñas iniciativas que experimentan con las herramientas y los contenidos».
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Por ello, ha alertado contra la limitación de los factores económicos a la hora de emprender proyectos ya que cierra el espacio cultural al debate y «silencia las minorías cuando la cultura busca visibilizarlas». Por ello, abogó por superar el «gastado» término de la diversidad por el concepto más contemporáneo de la «multiplicidad de ideas, iniciativas y personas» y apoyó la «visibilidad de la Casa Invisible» y su trabajo «frente a la cultura hegemónica».
Para este sábado, el Congreso Internacional sobre el Futuro de las Políticas Culturales acogerá la mesa redonda 'Mutiplicidad de la producción de conocimiento', con los profesores de la Universidad de Málaga Eva Morales, José V. Iranzo y Florencio Cabello, mientras que el domingo cerrará el plato fuerte del encuentro con el debate sobre instituciones artísticas en el que participarán los artistas Elo Vega y Rogelio López Cuenca; el director del Reina Sofía, Manuel Borja-Villel; el director honorario del Pompidou París, Bernard Blistène, y la responsable del IG Kultur Österreich de Viena, Gabriele Gerbasits.
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«Que instituciones tradicionales como el Pompidou de París o el Reina Sofia nos apoyen con su presencia y entiendan que la Invisible es rentable es importante», ha destacado el arquitecto Kike España, que ha avanzado que Multiplicity extenderá sus actividades durante todo el año y traerá experiencias similares a las suyas en Milán o Viena para que se vea que «cuando la iniciativas ciudadanas se regularizan y entran en relación virtuosa con el Ayuntamiento o la zona en la que se crean, aporta riqueza a nivel económico y cultural».
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