Concierto para plantas en el Liceo captado por Eugenio Ampudia. Francis Silva

El arte de la ecología en el Pompidou: de Genalguacil como fondo a un concierto para plantas

Artistas franceses y españoles invaden las zonas de paso y de descanso del centro cultural con sus reflexiones sobre la naturaleza

Jueves, 2 de diciembre 2021, 18:08

Las imágenes lo invaden todo. Se comparten, se duplican, se retocan y se difunden por todo tipo de pantallas a millones de personas de un ... extremo a otro del mundo. No hay límite, siempre hay espacio para un vídeo más. Y ese despilfarro no es inocuo: consumen una energía que contribuye al calentamiento global. Pero sucede que en ocasiones esas mismas imágenes son las únicas capaces de poner al ser humano ante su realidad, de mostrarle la catástrofe ambiental y remover su conciencia. En esa dualidad se mueve 'La ecología de las imágenes', la nueva propuesta del Centre Pompidou para la quinta edición de 'Hors Pistes', el programa que une a artistas españoles y franceses hasta el 17 de enero.

Publicidad

También aquí los vídeos y las fotografías invaden el lugar y 'okupan' las zonas de paso, las salas de descanso y la antigua cafetería del museo. Para visitar la exposición, con el patrocinio de Fundación la Caixa y CaixaBank, hay que seguir el camino que trazan en el suelo unas líneas verdes que recorren el centro y se ramifican frente a la instalación de cada uno de los once creadores. Once proyectos comisariados por Géraldine Gomez y José María Luna -responsable del Pompidou Málaga- que denuncian a su manera la catástrofe ecológica que provoca la acción humana descontrolada. Un paseo por la naturaleza que permite desde hacerse una fotografía con el Genalguacil de antes del incendio como marco hasta disfrutar de un concierto en el Liceu solo para plantas.

Noelia García Bandera firma ese 'photocall' natural que recibe al visitante y que ella invita a utilizar y pisar «para dejar huella». Con 'Natural background' rinde homenaje a los fondos que usaban los estudios fotográficos tradicionales de los barrios, con imágenes que caen y se prolongan por el suelo. Esta vez ella coloca como telón un fragmento del paisaje verde y frondoso de Genalguacil tomado en 2018 antes del incendio que arrasó Sierra Bermeja hace unos meses. «Seguro que ya no está igual por la mano del hombre», reflexiona la artista.

La música de Puccini que se escucha a lo lejos lleva a la siguiente parada. En el vídeo, un cuarteto de cuerdas interpreta 'Crisantemi' en el Liceo de Barcelona ante una audiencia de 2.292 plantas, una por butaca del teatro. Eugenio Ampudia pretendía establecer una relación de «igual a igual» entre las especies humana y vegetal. «Hay un cambio de paradigma. El antropoceno en el que estamos instalados no ha funcionado para nada, pasemos al bioceno», defiende. 'Concierto para el Bioceno' se grabó justo cuando el país salía del estado de alarma y, aunque solo lo escucharon en directo las plantas, las imágenes llegaron a 250 millones de personas de todo el mundo.

Publicidad

Arriba, pieza de Noelia García Bandera. Abajo, las obras de Nicolas Sasson & Rick Silva, y de Sabrina Ratté. Francis Silva

El concepto de «arqueología contemporánea» planea en varias piezas que capturan la naturaleza de hoy para el espectador del mañana. Lo hacen Nicolas Sasson & Rick Silva en 'Cores': dos audiovisuales con animaciones en 3D de rocas que se parten en dos para desvelar lo que guarda de civilizaciones pasadas. «Y lo que hay son imágenes electrónicas abstractas, es una distopía, no hay nada del pasado», apunta la comisaria. Sabrina Ratté, por su parte, coloca especies naturales en expositores, también con animaciones en 3D, para que en un futuro «la imagen pueda ser la muestra de una vegetación extinguida».

En 'Territorios líquidos', Judith Borobio se graba a sí misma realizando un millar de frottages de papel sobre rocas del litoral gaditano. Una especie de performance que se repite una y otra vez de distintas maneras con la que la artista pone en valor «el suelo que pisamos» y orienta el foco sobre las huellas que dejan los movimientos de un animal, mucho más efímero que la propia presencia. «Las rocas contienen la vida y la historia del universo», dice Borobio. Bárbara Fluxá, por su parte, se detiene en las marismas mediterráneas y a través de imágenes microscópicas o a vista de dron -en una gran pantalla dividida en cuatro ventanas- cuestiona la naturaleza híbrida de estos lugares: paisajes co-construidos por el medio no humano, la industria, la ciudad y la cultura. Lo llama 'El capítulo del mar'.

Publicidad

Pero siguiendo la línea verde se descubre mucho más. Jacques Perconte muestra con imágenes extremadamente pixeladas el deshielo de una montaña o un temporal en el mar; Nicolas Gourault desplaza la mirada del humano al animal para que veamos a través de los ojos de una rata y el joven Seumboy Vrainom pone en evidencia el contradicción que supone usar móviles fabricados con litio que se extrae de minas donde se explota a niños y mujeres. La representación española se completa con Daniel Canogar, que captura 'Ráfagas' de cuatro documentos recientes relacionados con el medio ambiente y los somete al viento de las ciudades donde fueron firmados; y con Fran Pérez Rus, que en el vídeo digital 'Deforestación' representa la fragilidad de los árboles.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €

Publicidad