Cuando Leia encontró a Chiquito de la Calzada

Aquella noche de 1989 en La Rosaleda la atención de las Serenatas de la Luna Joven la acaparó Paul Simon. Curiosamente, una semana después de que George Michael visitara la Costa del Sol. «Un maratoniano y emocionante concierto, en la noche del 11 de julio, dentro de su Graceland Tour», cuenta nuestro compañero Rafael Cortés en una crónica en SURtitulada El lujo de lo simple. Pero, aquél espectáculo tuvo su cara B.

Al acabar, Simon se puso flamenco. Junto a sus músicos se pegó una juerga en un tablao improvisado tras el escenario de La Rosaleda. En la foto para el recuerdo, que también recogía este periódico, un Chiquito de la Calzada en pleno apogeo flamenco, lejos del humorista en que se convertiría después. Si nos fijamos a la derecha de la foto, vemos a una actriz que ayer llenó las portadas de medio mundo: Carrie Fisher. Era expareja de Paul Simon, pero cuentan las crónicas que, casi cinco años después de su divorcio, seguían intentándolo. Hizo las maletas y se vino a la Costa del Sol. Ya había rodado los tres episodios de Star wars, pero la Princesa Leia pasó inadvertida. Siguió entre bambalinas el concierto y ambos compartieron después una semana de vacaciones en Málaga. Quién sabe si como amigos o como amantes en busca de una segunda oportunidad. Se alojaron en el Parador de Golf y participaron de diferentes eventos. Como recuerda el entonces concejal de Cultura, Curro Flores, asistieron a la presentación de la Feria en La Cónsula, un acto en el que tocaba el guitarrista Pepe Romero. Cuenta que cuando quedaban los últimos de la fiesta, Simon se arrancó a tocar la guitarra. Quienes compartieron veladas con ellos, les definen como una pareja normal y hablan de Fisher como una mujer discreta, siempre vestida informal y veraniega. Una Princesa Leia en chanclas que conoció a Chiquito el mismo mes que estrenó Cuando Harry encontró a Sally, una de sus apariciones más recordadas tras Star Wars.