Medina Azahara sigue a los Dólmenes en la carrera para ser Patrimonio Mundial

Por «aclamación popular» quedó ayer aprobada la candidatura española de Medina Azahara para ser declarada Patrimonio Mundial por parte de la Unesco en 2017, un afán que los Dólmenes de Antequera esperan lograr este año. La expresión la ofrecía ayer el secretario de Estado de Cultura, José María Lassalle, al término de la primera reunión del Consejo de Patrimonio Histórico que ayer y hoy se celebra en la capital cordobesa.

La cita sirvió, también, para que tanto el Lassalle como la consejera de Cultura, Rosa Aguilar, valorasen la propuesta malagueña. «Será valorada probablemente de manera muy positiva la candidatura», argumentó Lassalle en referencia a la decisión que los especialistas de la Unesco deben tomar de aquí al mes de mayo.

«Tanto por parte del Ayuntamiento (de Antequera) como por parte de la Junta de Andalucía hemos cumplimentado aquellos requisitos que nos pedían y esperamos que llegue esa cita para que se haga realidad ese reconocimiento. El esfuerzo lo hemos hecho también desde la colaboración institucional», acotó, por su parte la consejera.

«Hemos cumplido con los requerimientos y lo hemos hecho juntos, que es la mejor manera de que tengan resultados», remachó Aguilar en alusión al informe presentado en París y adelantado por este periódico (SUR, 3-3-2016). En ese documento, el Ayuntamiento antequerano se compromete a liberar los terrenos próximos al conjunto megalítico, mientras que la Junta derribará la primera planta del Museo del Sitio para rebajar su impacto visual, tal y como recomendaban los técnicos de la Unesco.