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Regina Sotorrío
Viernes, 13 de noviembre 2015, 15:08
Nunca se ha puesto demasiados filtros a la hora de hablar, pero asegura que con la edad esa ausencia de control se ha acentuado. Ahora que soy mayor digo y hago lo que me da la gana, a veces incluso de más, aseguró esta mañana Carmen Maura en la presentación de la película 'La vanité' en el Festival de Cine Francés de Málaga, que esta noche se proyecta en el cine Albéniz. Por eso, se atrevió a criticar la gestión de los teatros nacionales, a reconocer que todos los políticos le caen fatal y a poner sobre la mesa las diferencias entre Francia y España en el tratamiento de la cultura.
El respeto que Francia tiene por la cultura es la cosa que más envidia me da de ese país, con los del cine aquí se piensa que esto es una chirigota, aseguró la actriz, siempre risueña, bromista y cercana con la prensa. Su última película en frances la rodó con el director suizo Lionel Baier, 'La vanité', la historia de un hombre francés que quiere morir y viaja a Suiza donde la eutanasia está permitda. Un tema controvertido que el director aborda con humor y con una trama que roza el surrealismo. Es uno de los rodajes donde me lo he pasado mejor. Fue en verano en Lausana, me pude llevar a mi perra, me quedaba en una casita frente al lago. Cuando ya no tienes misión que cumplir en tu carrera, cuando estás tranquila en ese sentido, pasártelo bien en el rodaje cuenta mucho, admite la intérprete.
Sobre el cine español, asegura que preferiría que no recibiera ninguna ayuda, al igual que mucha gente de la profesión, para que se olvide ese sambenito de que es una profesión que vive únicamente de las subvenciones. Con el 21 por ciento de IVA que tenemos ya nos podrían quitar ese sambenito, afirma. Pero donde Carmen Maura se muestra más crítica es al hablar de los teatros nacionales: Es una merienda de negros. Los directores que llegan saben que van a estar un número determinado de años y se dedican a montar sus propias funciones, que nunca podrían montar en teatros privados, porque aquí las pagamos todos. Se buscan las funciones más caras que han soñado en su vida, y luego no tienen tiempo para otras cosas. No pienso volver al teatro nacional, sentencia.
Actriz de vocación relativa que disfruta enormemente de su trabajo, Carmen Maura se muestra muy agradecida con el cariño que le transmite el público y el respeto de la industria. Asegura que su vida ha estado jalonada de golpes de suerte increíbles, que nada de lo que le ha pasado estaba programado. No pensé nunca que me iba a cruzar con una japonesa y me iba a reconocer, he conseguido mucho más de lo que quería como actriz, concluye.
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