El triángulo maldito del monte, la carretera y el teleférico de Benalmádena

La mala noticia es que por encima de la autovía, a la altura de Benalmádena, además de una zona importante de monte hay una urbanización de viviendas, Santangelo Norte, que se puede ver afectada por ese incendio. Y por si eso fuera poco, por ese monte, transitan cada día en verano una media de 600 personas que suben y bajan en las cabinas del teleférico, la única instalación de este tipo que existe en toda la Costa, y que por tanto atrae a un volumen considerable de turistas.

El triángulo maldito de monte, carretera y teleférico, sumado a la presencia de viviendas habitadas hace de ésta una emergencia de primer nivel y convierte a ese punto concreto de la Costa del Sol en una zona de «máximo riesgo» cuando llega la temporada alta de incendios forestales, como la que se inicia ahora. Una zona que hasta ahora no se había «probado» nunca y que este miércoles ha puesto a prueba a todos los cuerpos de seguridad y emergencias en un simulacro de los hechos anteriormente descritos.

En total 300 personas: 220 efectivos y 80 figurantes han participado en este supuesto que planteaba la posibilidad de que ese fuego originado por el accidente fuera avivado por una zona de monte donde crece el matorral de esparto, que es un combustible «muy rápido», de manera que las llamas avanzasen a una velocidad de 20 kilómetros por hora hacia la zona del teleférico. Ante eso, lo que contempla el dispositivo de emergencias y lo que se ha puesto a prueba hoy es el confinamiento de todos los usuarios del teleférico en la zona alta del monte, protegidos por Protección Civil y Bomberos, mientras que se desarrolla el dispositivo de extinción de incendios.

Los cálculos del Grupo de Emergencias de Andalucía (GREA) es que si se diera un caso así podrían ser en torno a un centenar las personas que pudieran quedar confinadas en el monte, entre usuarios del teleférico y senderistas. Hoy se ha practicado con 35 figurantes.

Al respecto de los vecinos, el GREA ha probado este miércoles por primera vez en Benalmádena una figura que contempla el nuevo Plan de Emergencias de Andalucía, que es el alejamiento. Es decir, en lugar de evacuar a los vecinos, se les aleja de la zona de riesgo, pero se les mantiene en una zona cercana y segura, protegida también por los cuerpos de emergencia. El GREA calcula que si se diera el caso ensayado ahora serían unos 320 los vecinos afectados, aunque hoy han sido 30 los figurantes que han hecho las veces de vecinos.

«Los simulacros son un ejercicio fundamental para que cuando llegue una emergencia real podamos afrontarla con toda la fortaleza. En un simulacro ponemos a prueba nuestros medios, la coordinación entre los dispositivos y detectamos posibles deficiencias, lo que nos permite identificar los puntos de debilidad antes de que ocurra un suceso», destacó la delegada del Gobierno andaluz, Patricia Navarro, presente en el puesto de mando creado para esta simulación, junto con el alcalde de Benalmádena, Juan Antonio Lara.

En total en este simulacro han participado 77 medios técnicos, así como el GREA, Protección Civil, Infoca, Bomberos de Benalmádena, Mijas, Fuengirola, Torremolinos y el consorcio provincial, el centro de emergencias sanitario del 061, Cruz Roja, Guardia Civil, Policia Autonómica, Policía Nacional, Policía Local, agentes de medio ambiente, miembros de la red de radioaficionados y personal del teleférico.