Torremolinos obligará por convenio a Intu a completar las obras de los nuevos accesos

Las negociaciones para comenzar las obras del parque comercial y de ocio de Intu en Torremolinos siguen adelante. Así lo han confirmado este miércoles representantes de la inmobiliaria británica, que se han reunido con el alcalde, José Ortiz, y los técnicos municipales. El encuentro, celebrado en el Ayuntamiento, se produjo horas después de la confirmación de la venta del complejo que la promotora tenía en Asturias a un fondo alemán por 290 millones de euros. La empresa atraviesa serias dificultades económicas que han abierto varias incógnitas en torno a la ejecución de su proyecto en la Costa del Sol, donde prevén invertir más de 800 millones de euros. Durante la reunión, según ha podido saber este periódico, se perfilaron los detalles técnicos de los convenios que han de firmarse en los próximos meses para iniciar la edificación, cuya licencia podría concederse en mayo en caso de cumplir con el calendario acordado por ambas partes.

Desde el Consistorio someten la expedición de los permisos necesarios a varias condiciones como la obligatoriedad de concluir las obras para ampliar los accesos a Torremolinos. El Gobierno local pretende así, a través de una cláusula, blindar los trabajos que se inicien en las carreteras ante posibles imprevistos u operaciones empresariales, una medida tomada «más por responsabilidad que por desconfianza», explican fuentes municipales. La publicación del Plan General de Ordenación Urbana del municipio en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía allana el camino de Intu tras más de una década de trabas administrativas, aunque la deuda arrastrada, su caída en Bolsa y la venta de varios de sus activos en los últimos meses dejan en el aire la construcción del complejo de Torremolinos, concebido como una pequeña ciudad de 235.000 metros cuadrados y ocho barrios temáticos que en teoría abrirá sus puertas en 2023.

Ortiz, acompañado de la teniente de alcalde de Urbanismo, Maribel Tocón, se reunió con el consejero delegado de Intu en España, Salvador Arenere, que volvió a garantizar la construcción del complejo, principal apuesta de la promotora en Europa. «Nunca nos han transmitido dudas, siempre se han mostrado convencidos de que el proyecto saldrá adelante», detallan desde el Ayuntamiento. Ahora se inician dos procedimientos diferenciados: uno para la edificación del complejo y otro para el trazado de carreteras que abrirá nuevos accesos a Torremolinos. Según el calendario previsto, ambas obras coincidirán en el tiempo, aunque su tramitación es independiente. La promotora todavía debe firmar un acuerdo con el Ministerio de Fomento, entre otras razones para comprometerse a financiar las obras que multiplicarán por seis el número de carriles de entrada y salida a la localidad, como ocurrió en Zaragoza. Este trámite, explican las fuentes consultadas, está «bastante avanzado».

La venta de activos de Intu, que negocia con varios accionistas una inminente ampliación de capital, da por supuesto en los círculos empresariales que la inmobiliaria se deshará de su proyecto en Torremolinos, cuyo valor aumenta con cada licencia, pero desde la promotora insisten en la viabilidad del complejo y en que permanecerá en sus manos. Lo demás, consideran las mismas fuentes, responde «al deseo de la competencia de tumbar el proyecto», uno de los más ambiciosos planteados en la provincia hasta ahora.