¿Qué ocurrirá con el centro de menores de Torremolinos?

Desde entonces, hace ya seis meses, el Gobierno andaluz está a la espera de recibir un informe sobre el estado del edificio y, a partir de ahí, conocer su futuro. El servicio, mientras tanto, se ha esfumado de la ciudad. Los 45 trabajadores, según datos de CSIF, que rechaza el cierre, han sido recolocados, y los tutelados que allí había, una treintena, han sido trasladados a otros recursos, fuera de Málaga en algunos casos. Aún así, la clausura no se da por definitiva por el Gobierno andaluz, que fía el futuro de estas dependencias al veredicto técnico.

Curiosamente, este limbo en un centro de menores no es exclusivo de las instalaciones costasoleñas. En Jaén, el «Carmen de Michelena», con un cometido idéntico al «Virgen de la Esperanza», y también en una zona céntrica de la ciudad, echó el cerrojo en junio de 2022, por unas obras. Al igual que ocurrió en Torremolinos, el personal y los menores se reubicaron. La cuestión ha sido motivo de debate en el Parlamento andaluz, a preguntas del PSOE, que solicitó conocer los planes de la Consejería para el servicio jiennense, toda vez que las reformas, motivo del cese temporal de actividad, terminaron hace más de un año, como argumentó la diputada autónomica socialista Mercedes Gámez. El planteamiento del área de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad de la Administración andaluza, que dirige Loles López, aunque no termina de aclarar el futuro de estos centros, pasa por la necesidad de adaptar la respuesta de la comunidad a la Estrategia de Cuidados y Protección de Niños, que, está en sintonía, como se aclara, con la aprobada el Ministerio de Derechos Sociales. Dicho de otro modo, lo trasladado por la Junta sobre el marco general de atención a tutelados, parece empujar a dependencias como la de Torremolinos al cierre permanente. «En el Gobierno de Juanma Moreno tenemos muy claro que la mejor manera de atender a los menores tutelados por la Junta es en el seno de una familia y no en un centro», aseguró, el mismo día del anuncio de cierre temporal del «Virgen de la Esperanza» el director general de Infancia, Adolescencia y Juventud de la Junta, Paco Mora.

En el caso concreto de Torremolinos, además, casi se da por sentado, aunque no sea oficial, como ya se temía CC OO, en contra de la clausura, al hilo de la negociación sobre el futuro del personal allí adscrito. No en vano, el PP, en la campaña a la Alcaldía, anunció que, si lograba la victoria, cosa que ocurrió por mayoría absoluta, el Ayuntamiento y la Junta impulsarían una gran manzana social en pleno corazón de El Calvario, donde está el centro de menores, que pasa por la demolición del edificio en ruinas anexo a este (pensado para su ampliación, aunque nunca se hizo), algo todavía está pendiente, y por estudiar el cambio de uso de estas instalaciones. Desde el Gobierno municipal, no obstante, no dan todavía nada por hecho y aguardan a que la Consejería se pronuncie en primer lugar. En cuanto al PSOE de Torremolinos también se sumó a la idea de transformación del centro y, por medio de su grupo en la Diputación, solicitó en febrero, a la Junta, aunque sin éxito, que los 40.000 metros cuadrados de la parcela donde está el edificio se destinen a la promoción de viviendas públicas.